La caída del consumo no da tregua: Pérdida real de poder adquisitivo en aumento
La Cámara de Comercio y Servicios (CAC) reporta una disminución del 3,5% en el consumo durante febrero, exacerbando la pérdida real de poder adquisitivo. Los efectos del ajuste fiscal y las paritarias por debajo de la inflación, golpean duramente.
El escenario económico argentino sigue golpeando duro en el bolsillo de los ciudadanos. Los datos recientes de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) revelan una caída del 3,5% en el consumo durante febrero de 2024, sumando un total de 2,7% en los primeros dos meses del año. Este declive en el consumo se traduce en una preocupante pérdida real de poder adquisitivo para la población.
El Indicador de Consumo (IC) de la CAC, que refleja la evolución mensual del consumo de los hogares en bienes y servicios finales, arroja cifras preocupantes. A pesar de un leve incremento desestacionalizado del 1,5% en comparación con enero, el panorama general es desalentador. La inflación desenfrenada continúa su marcha, alcanzando una variación mensual del 13,2% en febrero, con una interanual de 276,2% y una acumulada anual de 36,6%.
Los recortes en asignaciones y subsidios, sumados al ajuste salarial por debajo de la inflación en algunas paritarias, están minando la capacidad de consumo de las familias. Esto se da en el contexto de un ajuste fiscal que busca equilibrar las cuentas públicas, pero que está golpeando fuertemente el bolsillo de los argentinos.
Entre los rubros más afectados se destacan recreación y transporte, con caídas interanuales del 13,2% y 2,3% respectivamente. Esta tendencia bajista se refleja en tres de los últimos cuatro meses, con febrero registrando la segunda mayor caída del índice desde marzo de 2021.
Las cifras de enero, reveladas por el INDEC la semana pasada, reflejan una situación igualmente preocupante. Supermercados, mayoristas y shoppings experimentaron fuertes caídas en sus ventas, mostrando un escenario de recesión y desaceleración del consumo.
La economía argentina enfrenta una situación crítica, con indicadores que reflejan una contracción del consumo y una creciente pérdida de poder adquisitivo. El Gobierno se enfrenta a un desafío monumental para revertir esta tendencia y generar las condiciones necesarias para la recuperación económica.
