Desmienten que niños de Berazategui hayan sido intoxicados por agua contaminada

Nueve alumnos de 5° y 6° de la Escuela N° 32 de esa localidad bonaerense fueron internados el miércoles. Las primeras versiones apuntaban al estado del agua que llega a las casas, tal como sucedió en los casos de gastroenterocolitis de abril último. Desde el Hospital Evita Pueblo, desmintieron esa hipótesis y aseguraron que los chicos se intoxicaron por vía respiratoria.

El miércoles, alumnos de la Escuela 32 de Berazategui, que participaban de un acto por el 12 de octubre, debieron recibir asistencia médica y nuevamente se reavivó el debate por el agua en el municipio.

Se trata de diez alumnos de 5° y 6° de la escuela n° 32 que, según las primeras versiones periodísticas, fueron internados con un cuadro gastrointestinal producto de una intoxicación, lo cual rápidamente se emparentó con el reclamo de vecinos que insisten con que el servicio de agua local está contaminada y no es apta para el consumo humano.

Este jueves, desde la dirección del Hospital Evita Pueblo de Berazategui explicaron a un noticioso berazateguense que los 9 alumnos, que fueron asistidos, ingresaron con un cuadro de descompensación e irritación de sus vías respiratorias.

De este modo, descartaron que haya sido por el agua, tal como había circulado a través de versiones periodísticas. «Ningún caso de intoxicación por ingesta de alimentos o agua genera irritación de las vías áreas», sentenció el Doctor Rodrigo Castañeda.

Vale recordar que el pasado mes de abril hubo un brote de gastroenterocolitis que también fue adjudicado a la contaminación del agua, pero esto fue desmentido oportunamente por el intendente Patricio Mussi.

Por otro lado, desde el Juzgado Federal de Luis Armella, el Departamento de Delitos Ambientales de la Policía Federal realizó los análisis correspondientes, los cuales habrían ratificado que el agua está contaminada y no está en condiciones de ser consumida y que “Puede generar una enfermedad transmitida por el líquido, pudiendo provocar infección urinaria, diarrea, gastroenteritis, meningitis, etc”. Por otra parte, el expediente agrega que se detectaron zonas con exceso de cloro en el agua que podrían causar “irritación gástrica”.