Salario mínimo en picada: pérdida de poder adquisitivo alcanza un tercio durante el gobierno de Milei

Un informe de CIFRA revela el drástico deterioro del salario mínimo, que se ubica en niveles inferiores a la crisis de 2001.

El Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM) ha experimentado una pérdida de poder adquisitivo de un tercio durante los primeros meses del gobierno de Javier Milei, según un informe reciente del Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (CIFRA). Este dato alarmante pone de manifiesto el fuerte retroceso en la capacidad de compra de los trabajadores que perciben el salario mínimo.  «Desde la asunción del actual gobierno, el salario mínimo perdió poder adquisitivo en una forma brutal. Entre noviembre de 2023 y abril del año en curso, el poder de compra de este salario se redujo en más de una tercera parte», señala el informe de CIFRA.

La investigación también destaca que esta reducción, sumada a la de años anteriores, ha desdibujado la función del SMVM como herramienta para establecer un piso salarial. «En febrero de este año, el salario mínimo representó menos de una quinta parte del salario promedio registrado del sector privado», agrega el informe.

Datos clave del informe de CIFRA:

  • El informe detalla que a lo largo de 2024 se realizaron cuatro reuniones del Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil. En todas ellas, ante la falta de acuerdo, la Secretaría de Trabajo determinó los aumentos nominales, que fueron prácticamente equivalentes a la propuesta del sector empresario.
  • «Su última resolución, de diciembre de 2024, implicó continuar con la tendencia decreciente del salario mínimo, de modo que se perdió entre el último aumento previo a esta resolución y el mes en curso un 7% de poder adquisitivo», explica CIFRA.
  • La pérdida sufrida durante este gobierno se acumula con retrocesos previos, por lo que el salario mínimo se ubicó en abril de 2025 en un nivel real que es 44,1% más bajo que en noviembre de 2019, al final del gobierno de Cambiemos, y 57,3% menor que noviembre de 2015. «Si el salario mínimo no hubiese perdido poder de compra a lo largo de este tiempo, estaría actualmente cerca de los $ 700.000», detalla el informe.  
  • «Tras este retroceso histórico el valor real del salario mínimo es inferior al vigente durante la mayor parte de la década de 1990 y en la crisis final del régimen de convertibilidad, cuando, como sucede en la actualidad, esta política se había abandonado como herramienta para determinar pisos salariales e impulsar una menor desigualdad salarial», agrega CIFRA.
  • «La comparación del salario mínimo con las líneas de pobreza y de indigencia revela una situación peor que la del año 2001. El salario mínimo en la actualidad equivale a solo el 58,1% de la canasta básica de alimentos que define la línea de indigencia para una familia tipo y poco más de una cuarta parte de la canasta de pobreza».

El impacto en los hogares:

El informe de CIFRA también destaca la creciente brecha entre el salario mínimo y las canastas básicas de alimentos y de pobreza. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC):

  • Una familia tipo necesitó $1.100.266,99 para no ser pobre y $495.616 para no caer en la indigencia.
  • El valor de la Canasta Básica Total se ubica un 4% por encima del monto del mes previo y un 42,3% interanual.
  • La Canasta Básica Alimentaria tuvo una suba del 5,9% mensual y del 38,4% interanual.
  • Las familias compuestas por tres integrantes necesitaron reunir $394.568 para superar el umbral de indigencia y $875.941 para no ser pobre.
  • Los hogares compuestos por cinco integrantes necesitaron $521.279 para no ser indigentes y $1.157.239 para superar el umbral de pobreza.

Estos datos revelan la creciente dificultad que enfrentan los hogares argentinos para cubrir sus necesidades básicas, especialmente aquellos que dependen del salario mínimo. La pérdida de poder adquisitivo del SMVM agrava la situación de vulnerabilidad de los trabajadores y sus familias, profundizando la desigualdad social.