Unico museo en Iberoamérica rinde homenaje a los tres chiflados en Adrogué
Descubrí el Chifladoseo con más de 2000 piezas originales y sumergite en la historia de la comedia clásica.
En una apuesta única en Iberoamérica, Adrogué alberga el «Chifladoseo», el primer museo dedicado a Los Tres Chiflados, que marcó el corazón de varias generaciones de argentinos con su humor físico y gags llenos de hilaridad.
El museo, ubicado en Segurola 1152, deslumbra a los visitantes con más de 2000 piezas originales que recuerdan la genialidad cómica de Moe, Larry y Curly.
«Los Tres Chiflados», compuestos por los comediantes estadounidenses Moe Howard y Larry Fine, junto con el tercer «chiflado» interpretado por diferentes actores a lo largo de 50 años, tienen un espacio dedicado en Adrogué gracias al esfuerzo del caricaturista y dibujante Diego Puglisi, creador del Chifladoseo.
El museo, inaugurado el 10 de abril de 2010, no solo resalta la colección personal de Puglisi, sino que también celebra el legado audiovisual del trío en blanco y negro. Con más de 2.000 objetos coleccionables, incluyendo carpetas con rutinas cómicas, muñecos, cartas escritas por los actores y guiones originales, el Chifladoseo ofrece a los visitantes una experiencia única.
Diego Puglisi, oriundo de Turdera, comparte su inspiración: «Los Tres Chiflados significan muchas cosas para mí. Constituyen un loco sinsentido, el delirio de ver a tres adultos comportarse como dibujos animados vivientes, ayudados en gran medida por los efectos de sonido». Destaca el impacto visual de los personajes, con sus distintivos cortes de cabello y personalidades que hacían reír con solo verlos.
La colección del Chifladoseo, inspirada por la creación del Stoogeum en 2004 en Filadelfia, abarca desde objetos cotidianos hasta guiones originales. El museo busca recrear el universo de Los Tres Chiflados con detalles en blanco y negro y grises, reflejando la época en la que la mayoría de su legado audiovisual fue creado.
Los muros del museo exhiben grandes posters y afiches originales de cada corto filmado, en varios idiomas. A pesar de las peleas y disputas en pantalla, prevalecía la amistad y la unión para enfrentar las situaciones disparatadas. El museo refleja esta esencia con una estatua de tamaño real de Shemp Howard, listo para realizar su característico baile previo a las peleas.
El Chifladoseo, una empresa conjunta que llevó años materializarse, invita a los amantes de la comedia clásica a sumergirse en la rica historia de Los Tres Chiflados, celebrando su legado atemporal y su contribución a la cultura cómica.
Para más info: http://www.chifladoseo.