El valor del conocimiento en la encrucijada: 68 ganadores del premio Nobel exigieron a Milei a cesar en la desarticulación del sistema científico argentino
Más de 60 premios Nobel alzan su voz contra el presidente Javier Milei, instándolo a detener el desfinanciamiento en Ciencia y Tecnología. La carta, dirigida a las altas autoridades, denuncia la eliminación de ministerios, despidos y recortes presupuestarios en el ámbito científico.
En un inédito acto de unidad, 68 premios Nobel dirigieron una carta al presidente argentino, Javier Milei, expresando su preocupación por las políticas que desmantelan el sistema científico del país. La misiva, dirigida a diversas autoridades, critica el despido de empleados del Conicet, la eliminación del Ministerio de Ciencia y Tecnología y la disminución de presupuestos en universidades.
Los premiados enfatizan su temor de que Argentina esté sacrificando a sus científicos y estudiantes. La devaluación de los presupuestos del Conicet y las universidades no solo refleja un menosprecio a la ciencia, sino también al pueblo argentino y su futuro. Advierten que cancelar o devaluar la ciencia sería un grave error, pues la inversión en investigación es clave para el progreso económico y la independencia.
La carta destaca el papel esencial de Argentina en la escena científica mundial. El país ha desarrollado su propia vacuna contra el Covid-19, lanzado satélites y diseñado reactores nucleares avanzados. Ocupa el décimo lugar mundial en empresas de biotecnología, prometiendo avances en medicina y agricultura. Los premiados resaltan la rica base científica argentina que, si se respeta, puede conducir a mayores logros.
El llamado de los premios Nobel resuena como un recordatorio urgente. La ciencia argentina, cuya excelencia ha sido reconocida globalmente, enfrenta una amenaza existencial. El desmantelamiento de programas de investigación y la reducción de estudiantes e investigadores jóvenes pueden destruir décadas de progreso.
Argentina tiene el potencial de liderar en diversas áreas científicas, pero esto requiere compromiso y financiamiento. La carta, respaldada por lumbreras científicas, reclama no solo por el presente sino por el futuro del país. En este crucial momento, la decisión de Milei sobre el destino de la ciencia argentina determinará no solo el rumbo del conocimiento, sino también el camino hacia el progreso y la independencia económica. La respuesta a este llamado resonará no solo en laboratorios y aulas, sino en la historia misma de una nación que ha brillado en el firmamento científico mundial.