La dislexia afecta a «entre un 10 y 15% de la población»

 

Uno de los trastornos de aprendizaje más frecuentes que afecta a los niños en edad escolar es la dislexia, por lo cual este sábado se celebra su día internacional para concientizar a la población.

Las Dificultades Específicas de Aprendizaje (DEA), entre ellas la dislexia, afectan a «entre un 10% y un 15% de la población», mientras que al menos uno de cada 10 niños con este trastorno tiene problemas escolares y «la mayoría no poseen un diagnóstico certero», afirmó este viernes María Arabetti, presidenta de Disfam Argentina.

Uno de los trastornos de aprendizaje más comunes que afecta a los niños en edad escolar es la dislexia, motivo por el cual este sábado se celebra su día internacional para concientizar a la población y se iluminará la Argentina y el mundo entero «de color azul turquesa», señaló a Télam Radio Arabetti, quien también es mamá de un joven con DEA y maestra.

Esta asociación sin fines de lucro está integrada «por familias con hijos con dislexia y otras dificultades específicas de aprendizaje, adultos con este trastorno y profesionales tanto del ámbito de la educación como de la salud, preocupados y sensibilizados por estas dificultades invisibles y por las consecuencias emocionales que conllevan», detalló Arabetti.

¿Qué es la dislexia?

La dislexia es «un trastorno de aprendizaje de la lectura y la escritura de carácter persistente y específico», que se da en niños que «no presentan ningún hándicap (desventaja) físico, psíquico, ni sociocultural», y cuyo origen «parece derivar de una alteración del neurodesarrollo».

En este sentido, los niños con dislexia manifiestan dificultades para «recitar el alfabeto, denominar letras, realizar rimas simples y analizar o clasificar los sonidos», explicó Arabetti.

Asimismo, muchas veces su lectura se caracteriza por «omisiones, sustituciones, distorsiones, inversiones, o adiciones, lentitud, variaciones y problemas de seguimiento visual, y déficit en la comprensión», agregó.

El principal problema que presenta la dislexia es que «no es compatible con nuestro sistema educativo», ya que «todos los aprendizajes se realizan a través del código escrito» y por lo tanto «no pueden asimilar ciertos conocimientos por no llegar a su significado a través de la lectura».

De esta forma, las niñas y niños con dislexia «deben poner tanto esfuerzo en las tareas que tienden a fatigarse, a perder concentración, a distraerse», lo que suele interpretarse como «falta de interés sin comprender el sobreesfuerzo diario que realizan», aseguró Arabetti.

Por este motivo, desde Disfam Argentina buscan «hacer visible estas dificultades iluminando nuestro país y el mundo entero de color azul turquesa, porque cuando aprender duele algo está pasando y es muy importante hacerlo visible», concluyó.