Crecen los incendios en California

Cientos de bomberos, policías y rescatistas adicionales fueron desplegados hoy en el norte del estado de California para intentar contener grandes incendios forestales que ya han dejado al menos 15 muertos, entre ellos un hombre de 100 años y su mujer de 98 cuya casa fue devorada por las llamas

El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo hoy desde Washington que el gobierno federal estará junto al pueblo de California para ayudarlo en este momento de «tragedia», luego de firmar una orden que declara una situación de desastre en el estado y que permite canalizar hacia él mayor ayuda estatal.

En declaraciones a la prensa, el mandatario dijo que anoche habló por teléfono con el gobernador de California, Jerry Brown, para «hacerle saber que el gobierno federal estará junto al pueblo de California. Y estaremos allí con ustedes en este momento de terrible tragedia y necesidad».

Autoridades del estado del oeste del país dijeron que esperaban vientos más frescos y menos intensos que ayuden a las cuadrillas a hacer frente a los incendios, que se cuentan entre los más letales de la historia de California y que continuaban ardiendo fuera de control en la zona del estado famoso por sus viñedos.

«El tiempo ha estado trabajando a nuestro favor, pero no significa que vaya a seguir así», dijo el vocero de la Oficina de Servicios de Emergencia de la gobernación de California, Brad Alexander.

Los bomberos extra llegaron desde otras partes de California y desde el vecino estado de Nevada, y los policías adicionales ayudarán con las evacuaciones y vigilarán para evitar saqueos de casas temporalmente dejadas por sus dueños, agregó Alexander en declaraciones a la prensa, informó la cadena CNN.

Al menos 100 personas sufrieron heridas, que unas 2.000 viviendas o negocios fueron destruidos, más de 24.000 hectáreas arrasadas y 20.000 personas evacuadas desde que comenzaron los incendios, el domingo, dijeron autoridades, que advirtieron que las cifras seguro aumentarán cuando se tenga mayor información.

Entre los 15 muertos registrados hasta ahora figuran Charles y Sara Rippey, quienes estaban casados desde hace 75 años y vivían en el barrio cerrado de Silverado Resort, en el condado de Napa.

«Lo único peor (que hayan muerto) habría sido que alguno de los dos hubiera sobrevivido y el otro no», dijo su hija, Ruby Gibney, al canal de televisión KTVU, de la ciudad de Oakland.

Las llamas, que obligaron a cortar importantes rutas, se extendieron en menos de 24 horas por un área de varias decenas de kilómetros cuadrados mientras escuadrones de helicópteros y aviones las bombardeaban con agua y retardantes del fuego.

El número de bomberos involucrados en el combate a los incendios trepó hoy a los 1.100, según dijo Alexander.

El gobernador demócrata Brown declaró ayer el estado de emergencia en los ocho condados afectados por los incendios para permitir el despliegue de más ayuda estatal y, además, solicitó a Trump que declarara la situación de desastre en esas zonas.

Las autoridades aún no han podido estimar con exactitud qué parte de la zona de los viñedos y bodegas que hacen famosa a esta región de California quedó destruida por el fuego, explicó hoy el jefe del Departamento de Silvicultura y Protección de Incendios del estado, Ken Pimlott. Además, más de 100.000 clientes están sin servicio eléctrico.

Las autoridades advirtieron que se trata de uno de los peores incendios forestales masivos de la historia reciente del estado, y ya lo comparan con que azotó la localidad de Cedar, en el condado de San Diego en 2003, un desastre natural que destruyó más de 2.800 hogares.