Los gremios advierten que habrá «conflictos docentes en todo el país»

El titular de la CTA, el kirchnerista Hugo Yasky, adelantó un conflictivo panorama en la paritaria nacional. Otra vez peligra el comienzo de las clases.

Esta semana, el ministro de Educación, Esteban Bullrich, recibió a los gremios docentes nacionales para destrabar la paritaria y garantizar el inicio de las clases. Tras la reunión, la negociación parecía haber quedado cerca de estar cerrada y el acuerdo se firmaría el viernes. Sin embargo, por orden del presidente Mauricio Macri, Bullrich dejó sin efecto su propia oferta de un incremento de 40% para el cargo inicial, lo que desató la furia de los docentes. El argumento oficial fue que la Nación quería esperar a que las provincias cerrasen sus acuerdos para luego firmar la paritaria nacional.

Frente a los argumentos oficiales, el titular de la CTA kirchnerista, el kirchnerista Hugo Yasky, recordó que «el tramo de la negociación salarial nacional sirve para ordenar y allanar el camino para poder llegar a los acuerdos provinciales» y, en diálogo con Página/12, precisó que «la pretensión de invertir esa lógica y poner por delante la discusión con las provincias, para después definir el acuerdo nacional, va a abrir un laberinto de conflictos que nos van a retrotraer a las épocas previas a la Ley de Financiamiento Educativo».

«El acta entorpecía las paritarias provinciales», fue toda la explicación que dio Esteban Bullrich, quien sostuvo que la Nación pretende esperar que las provincias cierren sus paritarias antes de hacerlo a nivel nacional, un cambio que responde a que los números que se habían acordado condicionaron a las administraciones de algunos distritos.

Bullrich se había comprometido el martes a llevar el salario inicial a $7.800 este mes y a $8.500 en julio, lo que iba a elevar el piso un 32% en promedio, con picos del 40% en algunos casos. En ese contexto, y a solo una semana del inicio del ciclo lectivo, Macri aseguró que existe un límite de 25% de aumento para la discusión salarial docente en cada provincia, y advirtió que hay muchos gobernadores que ni siquiera pueden llegar a ese porcentaje.

 

El comienzo de las clases, previsto para el 29 de febrero, está en riesgo y en estas circunstancias el titular de la CTA, Hugo Yasky, manifestó que la decisión del Gobierno de retirar la oferta es «un verdadero bochorno» y «un papelón». «Es imposible creer que el ministro hiciera pública una propuesta y que con posterioridad esto fuera desconocido por el presidente», explicó. En este sentido, el dirigente sindical calificó lo sucedido como «una muestra elocuente de la improvisación o la incapacidad de gestionar en una trama compleja como es la paritaria docente».

Jorge Triaca pidió a los docentes «ser cuidadosos» en la negociación»

Además, Sonia Alessio, titular de Ctera, señaló al mismo medio que «es falso» que primero se deban cerrar las paritarias en cada distrito: «Este es un país federal, cada provincia tiene su ley específica de paritarias. No corresponde hacer esto al revés». Y agregó: «Si el gobierno nacional quiere ayudar a algunas provincias que están en conflicto obviamente puede hacerlo porque los argentinos lo han elegido para eso, está en sus facultades. Lo que no puede hacer es intervenir en una negociación paritaria de los trabajadores».

En medio de la polémica, llegaron las declaraciones del ministro de Trabajo, Jorge Triaca, quien advirtió que «hay que ser cuidadoso que cada una de las provincias pueda tener los recursos para que las negociaciones lleguen a buen puerto». Además, el funcionario expresó que «se ha tergiversado mucho cuál era la propuesta y algunos han llevado a una cifra que no correspondía», e insistió en que «es oportuno que terminen la negociación las provincias sabiendo cual es el compromiso del gobierno nacional.