Triple crimen en Varela: la familia de Lara pide que la causa no pase al fuero federal
El triple crimen en Varela con sello narco genera un conflicto judicial: la familia de Lara Gutiérrez exige que la investigación permanezca en el fuero provincial hasta la captura de los prófugos, temiendo que el narcotráfico eclipse la causa por los homicidios.
 
								La conmoción por el triple crimen en Varela, donde perdieron la vida Lara Gutiérrez, Brenda y Morena en un hecho con presunto sello narco, ingresa en una nueva y sensible dimensión judicial. La familia de Lara Gutiérrez ha elevado un pedido formal y urgente para que la causa no sea derivada al fuero federal de manera prematura. El eje de su preocupación se centra en un temor concreto: que la investigación por narcotráfico, inherente al contexto del suceso, termine por relegar la búsqueda de justicia por los homicidios, dificultando el esclarecimiento completo de las muertes y la detención de todos los responsables.
La puja judicial: el fuero provincial versus la órbita federal
La Justicia de Garantías de La Matanza, donde se tramita inicialmente la causa, ha dado el aval para que el expediente alcance la instancia federal «a la brevedad». Sin embargo, esta posible derivación activó la alarma en el círculo íntimo de las víctimas.
Agostina Gutiérrez, hermana de Lara, sintetizó el sentir familiar en un comunicado: «Necesitamos justicia y queremos llegar al fondo de la investigación. Sabemos que si pasa al fuero federal, los homicidios van a quedar en la nada». Esta percepción se basa en el temor de que la especialización y prioridad de la Justicia Federal se enfoque en el delito de narcotráfico, dejando los crímenes de las jóvenes en un segundo plano.
«Tememos que al pasar al fuero federal, el foco de la investigación recaiga sobre el delito de narcotráfico y los homicidios queden relegados. Queremos saber la verdad», sostiene la familia.
El triple crimen en Varela es, ante todo, un caso de pérdida de vidas, y para la familia, es primordial que la investigación penal ordinaria, bajo la jurisdicción provincial, cumpla con su deber de administrar justicia por esos homicidios antes de cualquier transferencia de jurisdicción.
El reclamo por los prófugos: un paso previo e ineludible
La posición de la familia Gutiérrez no es un rechazo absoluto a la Justicia Federal, sino una exigencia de priorizar la conclusión de la investigación por los asesinatos en el ámbito donde se inició. Su pedido apunta a una condición sine qua non: la captura de los tres prófugos restantes antes de cualquier derivación.
Los familiares han identificado públicamente a los individuos aún no detenidos, conocidos por los apodos de «El loco David», «Tarta», y «Papá» y «Alex», instando a las autoridades a agotar todos los recursos para su inmediata localización y detención. La presencia de estos sospechosos es crucial para desentrañar la mecánica y los responsables directos del triple crimen en Varela.
La primacía del bien jurídico de la vida
En su duro comunicado, la familia cuestionó la posible preeminencia de la investigación económica criminal sobre la penal: «¿Cómo puede ser que prevalezca la investigación del delito de narcotráfico sobre el bien jurídico de la vida? La vida que le arrebataron a Lara, Brenda y Morena». Este interrogante subraya la profunda preocupación ética y legal sobre la jerarquía de los delitos en este contexto.
Argumentan que es el fuero ordinario de San Justo el que tiene la «responsabilidad de garantizar justicia y llevar a los culpables ante la ley», concluyendo con un llamado a la transparencia: «Basta de engañarnos con falsos argumentos».
Un conflicto de prioridades en la búsqueda de justicia
El caso del triple crimen en Varela ilustra un dilema recurrente en crímenes complejos con trasfondo organizado: cómo equilibrar la persecución de los delitos de mayor impacto social (como el homicidio) con la investigación de la red criminal subyacente (el narcotráfico).
Para los allegados de las víctimas, la respuesta es clara: la vida de Lara, Brenda y Morena debe ser la prioridad absoluta y el motor principal de la causa. El traslado de la investigación al fuero federal en este momento podría percibirse como un cambio de foco que, si bien combate la criminalidad organizada, posterga la justicia para las víctimas.
La presión de la familia busca asegurar que la investigación en curso en la provincia de Buenos Aires cumpla integralmente con su misión, deteniendo a todos los partícipes directos de los asesinatos antes de que la dimensión del narcotráfico absorba el foco principal de la pesquisa. El futuro inmediato de la causa, y el dolor de los familiares, pende de esta decisión jurisdiccional.

 
						 
						