Las reservas del Banco Central inquietan a Caputo: Caída sostenida pese a los esfuerzos
A pesar de los desembolsos y las estrategias implementadas, las arcas del BCRA no logran revertir la tendencia negativa, profundizando la preocupación en el Gobierno.

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) atraviesa un momento crítico con la persistente caída de sus reservas internacionales, un dato que mantiene en vilo al ministro de Economía, Luis Caputo. En las últimas dos semanas, la entidad ha visto una disminución acumulada de US$ 554 millones, con una pérdida de US$ 80 millones solo en la jornada del jueves, lo que marca la octava jornada consecutiva de reducción. Actualmente, las reservas se sitúan en US$ 38.096 millones, representando un descenso de aproximadamente US$ 661 millones desde el cierre de abril.
A pesar de los recientes desembolsos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por US$ 500 millones y de un aporte previo de US$ 1500 millones, el objetivo de acumulación de reservas netas se mantiene esquivo, estando casi US$ 4700 millones por debajo de la meta establecida. La estrategia del BCRA incluye la emisión de un bono peso linked o un REPO para intentar sumar divisas, aunque estas medidas también implican un ajuste al alza de la meta de reservas en un máximo de US$ 1500 millones.
Desequilibrios externos y tensión social
El Gobierno mantiene la confianza en que la apreciación cambiaria contribuirá a contener la inflación, pero la realidad económica muestra una acumulación de desequilibrios en el frente externo. La sostenida caída de las reservas plantea desafíos significativos para la estabilidad económica del país, generando incertidumbre en un contexto ya complejo.
Paralelamente a esta situación económica, el Ejecutivo endurece su postura en el plano interno. El mismo día en que se conocía el preocupante descenso de las reservas, se reprimió una manifestación de jubilados frente al Congreso y se publicó un decreto que restringe el derecho a huelga, ampliando el listado de actividades consideradas esenciales. Estas acciones reflejan la creciente tensión social en un escenario donde la economía argentina aún no exhibe señales claras de recuperación. La combinación de la presión sobre las reservas y el recrudecimiento de las medidas internas subraya la complejidad del panorama que enfrenta el gobierno.