Encuesta revela fuerte descenso en la popularidad de Milei en marzo: la economía argentina en el centro de la tormenta
Un reciente sondeo de la consultora Atlas Intel, que predijo su victoria electoral, muestra un marcado deterioro en la imagen del presidente Javier Milei, con la preocupación económica liderando el descontento de los argentinos.

Un viento de cambio parece soplar en la opinión pública argentina, al menos según los últimos datos revelados por la consultora brasileña Atlas Intel. La encuesta, que históricamente anticipó el triunfo de Javier Milei en las urnas, arroja ahora un panorama preocupante para el mandatario libertario. Durante el mes de marzo, su imagen sufrió un notable revés, evidenciando un creciente malestar entre la población, donde la situación económica se erige como el principal foco de inquietud.
Los números hablan por sí solos: la desaprobación de la gestión de Milei escaló hasta un 48,9%, superando a la aprobación, que se sitúa en un 46,5%. Este cambio de tendencia es aún más pronunciado al analizar la imagen personal del presidente, donde el rechazo alcanza un 51% de valoraciones negativas. Estos datos sugieren un punto de inflexión en la percepción pública del líder libertario, marcando un contraste significativo con la euforia que acompañó su llegada a la Casa Rosada.
El gobierno en su conjunto tampoco escapa al escrutinio negativo. La encuesta de Atlas Intel revela que un 47,9% de los argentinos califica la gestión actual como “mala” o “muy mala”, lo que representa un aumento de 3,8 puntos porcentuales en comparación con el mes anterior. En contraposición, solo un 44% considera la administración libertaria como “buena” o “excelente”. Este deterioro en la evaluación de la gestión gubernamental subraya la creciente insatisfacción con las políticas implementadas hasta el momento.
El corazón del descontento argentino parece latir al ritmo de la economía. Un abrumador 65% de los encuestados describe la situación económica del país como “mala” o “muy mala”, mientras que un exiguo 13% la percibe de manera positiva. Este pesimismo generalizado se ve exacerbado por la inflación, que continúa siendo la principal preocupación para el 69,3% de los argentinos, contradiciendo el discurso oficial que intenta minimizar su impacto.
La escalada de precios ha impactado directamente en el bolsillo de los ciudadanos. Un contundente 91,3% de los encuestados asegura que sus ingresos no logran seguir el ritmo de la inflación, siendo las tarifas de servicios básicos como el gas y la luz, así como los alimentos, los rubros más afectados. Ante esta realidad, más de la mitad de la población (53,1%) considera que el gobierno debería implementar medidas más contundentes para frenar la inflación.
La política económica implementada por la administración de Milei no parece generar la confianza necesaria para revertir esta situación. Un 50,6% de los encuestados responsabiliza directamente al gobierno actual por el aumento generalizado de precios, lo que pone en tela de juicio la efectividad de las medidas adoptadas hasta el momento. Incluso el ajuste fiscal, una de las banderas de la gestión libertaria, genera escepticismo: el 44,2% cree que profundizará aún más la crisis, y un 64% desconfía de la capacidad del ministro de Economía, Luis Caputo, para enderezar el rumbo.
Ante este panorama económico adverso, los argentinos están recurriendo a diversas estrategias para hacer frente a la crisis. Un 64,4% declara buscar activamente promociones y descuentos al realizar sus compras, mientras que un 54,6% ha optado por reducir el consumo de ciertos productos, evidenciando el impacto directo de la inflación en los hábitos de consumo.
El malestar con las políticas del gobierno no se limita al ámbito económico. En cuanto a la política exterior, un 48,7% de los encuestados teme que las medidas económicas impulsadas por Donald Trump generen aún más inflación en Argentina, y un 50,2% respalda la idea de que el gobierno tome represalias si la Casa Blanca impone aranceles severos. La dolarización, otra de las propuestas emblemáticas de Milei, tampoco goza de un apoyo mayoritario, ya que el 39% opina que agravaría la crisis actual.
En el terreno político, a pesar de la caída en su imagen general, Javier Milei aún conserva un 48% de imagen positiva, liderando las preferencias individuales. Sin embargo, una figura emerge con fuerza en el escenario político: Cristina Fernández de Kirchner. La ex presidenta experimentó un notable ascenso de 5 puntos en su imagen positiva durante el último mes, alcanzando un 41% de respaldo y acortando la distancia con el actual mandatario. Detrás de ellos se ubican Axel Kicillof (34%), Victoria Villarruel (31%), Sergio Massa (27%) y Mauricio Macri (24%).
Los resultados de esta encuesta de Atlas Intel pintan un panorama complejo para el gobierno de Javier Milei. El fuerte deterioro en su imagen, impulsado principalmente por la creciente preocupación económica, podría representar un desafío significativo para la gobernabilidad en los próximos meses. La consolidación del pesimismo económico y el ascenso en la popularidad de figuras opositoras como Cristina Kirchner sugieren un escenario político dinámico y potencialmente turbulento, donde la capacidad del gobierno para ofrecer soluciones efectivas a la crisis económica será crucial para recuperar la confianza de los argentinos.