Sueldo para pocos, ajuste para todos: el escándalo salarial en YPF
La petrolera estatal desembolsó más de 11 millones de dólares en honorarios para su directorio, mientras el gobierno de Milei insiste en la "austeridad" para el resto del país. El caso de Guillermo Francos, un enigma sin resolver.

El relato de la «motosierra» y el «Estado elefantiásico» choca de frente con la realidad cuando se revisa la planilla salarial de YPF. Mientras el gobierno de Javier Milei pregona ajustes y recortes, la petrolera estatal destinó más de 11 millones de dólares a los sueldos de su directorio en 2024. Una contradicción que, lejos de ser un «error de interpretación», expone los privilegios de la cúpula libertaria.
Horacio Marín, el mejor pago del «club de la austeridad»
El presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, encabeza la lista de los más beneficiados con este reparto millonario. Detrás de él, el directorio de la petrolera está conformado por nombres afines al oficialismo y al sector energético: el exgobernador de Neuquén Omar Gutiérrez, el exsecretario de Energía Eduardo Rodríguez Chirillo y Carlos Bastos, un histórico promotor de la privatización en el sector.
La paradoja es evidente: el discurso del «Estado ineficiente» no aplica cuando se trata de los bolsillos de quienes conducen la petrolera estatal. Mientras tanto, el ajuste lo sufren los trabajadores y el resto de la sociedad, que paga con tarifazos y recortes la «eficiencia» pregonada desde la Casa Rosada.
El misterio Francos: ¿cobra o no cobra?
Uno de los puntos más turbios del escándalo es el caso de Guillermo Francos, jefe de Gabinete de Milei. Oficialmente, YPF asegura que es director suplente y que no percibe salario. Sin embargo, en el sitio web de la petrolera aparece como director titular, lo que indicaría que sí cobra. Cuando se lo consultó en el Congreso sobre el tema, esquivó la respuesta con una destreza digna de un equilibrista.
No es el único caso dudoso. El vicejefe de Gabinete, José Rolandi, también figura en la estructura de la petrolera sin que su situación salarial esté clara. En un gobierno que se jacta de la «transparencia» y el «orden», el manejo de estas designaciones deja más sombras que certezas.
El contraste de Jimena Latorre: una excepción a la regla
Dentro del directorio también aparece Jimena Latorre, ministra de Energía de Mendoza. A diferencia de sus compañeros, Latorre transfiere su salario al gobierno de su provincia, cumpliendo con una norma impuesta por el gobernador Alfredo Cornejo. Una actitud que, en este contexto, resalta aún más la avidez del resto por los privilegios.
Austeridad selectiva: recortes para el pueblo, millones para la cúpula
El escándalo de los sueldos en YPF no es un hecho aislado. Forma parte de una serie de contradicciones que tambalean el discurso de Milei. Se suma al gasto de 100 mil millones de pesos en publicidad durante la gestión de Santiago Caputo, a pesar de la promesa de eliminar la pauta oficial. Además, el costo de estos sueldos pone en jaque la defensa de la empresa en el juicio con el fondo Burford, que sostiene que YPF sigue operando como un brazo del Estado.
Mientras el ajuste golpea a la mayoría, un selecto grupo de funcionarios y aliados sigue acumulando beneficios a espaldas del discurso oficial. La «motosierra» parece tener un filtro: corta para unos, pero no para otros.