Primeros casos autóctonos de dengue en el AMBA

La combinación de altas temperaturas, humedad y una falta de campañas de prevención efectivas plantea un escenario de riesgo para el AMBA y otras regiones en la próxima temporada estival.

Con la llegada del calor, el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) enfrenta un temprano incremento de casos de dengue autóctono. La situación no se limita a esta zona, ya que provincias como Mendoza, Córdoba y Tucumán han reportado contagios en personas sin antecedentes de viaje, según el último Boletín Epidemiológico del Ministerio de Salud de la Nación. En la última semana, seis nuevos casos autóctonos fueron confirmados, revelando un posible brote de dengue en el país.

En detalle, los reportes de la semana incluyeron dos casos en Córdoba, uno en Mendoza y otro en Tucumán. También se detectaron dos casos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y el partido bonaerense de La Matanza. Todos estos contagios corresponden al serotipo DEN-1, el de mayor presencia en Argentina. Las autoridades sanitarias subrayan la necesidad de controlar al mosquito Aedes aegypti, vector de esta enfermedad, para evitar que el dengue se propague durante el verano, cuando el clima favorece la reproducción de este insecto.

A pesar de que los casos autóctonos son aún limitados, el Ministerio de Salud no ha escatimado en advertencias. Los registros más recientes también incluyen cinco casos importados, de los cuales dos corresponden a residentes de Buenos Aires con antecedentes de viaje a Brasil y Cuba, y otro a Córdoba, donde el infectado viajó a Cuba y presentó el serotipo DEN-4. Además, CABA reportó un caso de un viajero proveniente de India, y Mendoza un contagio de alguien que regresó de Perú. En adición, se confirmaron tres casos en personas trasplantadas y un caso vinculado a una reciente vacunación contra el dengue.

Las autoridades resaltan la importancia de extremar las precauciones, ya que los patrones climáticos actuales – con altas temperaturas y humedad – crean un ambiente propicio para el desarrollo del Aedes aegypti. Recomiendan eliminar cualquier acumulación de agua estancada, como en recipientes y macetas, donde el mosquito encuentra el lugar ideal para reproducirse. También instan a la población a mantener mosquiteros y utilizar repelentes, especialmente en las zonas donde se ha detectado la circulación del virus.

Con la llegada de la temporada de vacaciones, la movilidad de personas entre distintas provincias y el incremento de temperaturas, el riesgo de expansión de este virus es alto. La situación pone de relieve la urgencia de políticas públicas más efectivas para controlar la propagación del dengue y proteger a la población en una época del año que podría agravar el impacto de esta enfermedad.

Así, el AMBA y otras áreas afectadas deben estar en alerta y adoptar medidas de prevención, anticipándose a lo que podría convertirse en un brote de mayor magnitud.