Bancos ajustan los topes para la extracción de efectivo: nuevos límites en cajeros automáticos
Las entidades financieras actualizaron los montos máximos para extraer dinero por cajero automático, mientras el Gobierno Nacional fijó por decreto un nuevo Salario Mínimo, Vital y Móvil. Ambas decisiones, comunicadas en mayo de 2025, generan un nuevo escenario para las finanzas personales en un contexto de alta inflación y creciente digitalización de las operaciones.

Mayo de 2025 ha traído consigo una serie de anuncios económicos que inciden directamente en la cotidianeidad de los ciudadanos argentinos. Por un lado, diversas entidades bancarias han implementado modificaciones en los topes diarios para la extracción de efectivo a través de cajeros automáticos. Por otro, el Poder Ejecutivo Nacional ha establecido, mediante una resolución publicada en el Boletín Oficial, los nuevos valores del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM), una medida que no ha estado exenta de controversia.
Nuevos límites para retirar efectivo: Adaptación a un entorno cambiante
En respuesta a una menor demanda de dinero físico y al auge sostenido de las transacciones digitales, varios bancos del sistema financiero argentino han actualizado los límites de extracción de efectivo por cajero automático. Esta es la segunda modificación del año, tras los ajustes realizados en enero. Si bien la tendencia hacia la digitalización es clara, el uso de efectivo sigue siendo relevante para una porción significativa de la población, especialmente en un contexto inflacionario que aún se mantiene elevado.
Las nuevas condiciones para el retiro de dinero varían considerablemente entre entidades, y suelen estar supeditadas al tipo de cuenta que posea el cliente, la red de cajeros automáticos que utilice (propia o de terceros) e incluso el perfil crediticio o de consumo del usuario.
Entre las principales instituciones, el Banco Nación ha fijado un nuevo límite de $150.000, aunque ofrece la posibilidad de ampliarlo hasta $500.000 a través de su aplicación móvil. Por su parte, el Banco Provincia permite extracciones diarias de hasta $400.000.
En el sector privado, Banco Galicia ha establecido un retiro máximo de $800.000, con una opción de incremento hasta $1.200.000 si la gestión se realiza mediante su plataforma online. Banco BBVA se posiciona con un tope de $1.000.000 para operaciones en sus cajeros propios, mientras que el límite desciende a $400.000 si se utilizan terminales de otras redes.
Banco Santander ha comunicado un tope general de $550.000, el cual puede extenderse hasta $2.100.000 para clientes pertenecientes a segmentos superiores o premium. Finalmente, Banco Macro posibilita extracciones de hasta $800.000, cifra que también puede fluctuar según el perfil del cliente y la red de cajeros empleada.
Es importante destacar que, si bien la mayoría de las entidades permiten la ampliación de estos límites a través de sus plataformas de home banking o aplicaciones móviles, algunas pueden requerir validaciones adicionales, como comunicaciones telefónicas o la superación de ciertos filtros de seguridad, antes de autorizar montos mayores. Asimismo, se reitera que al utilizar cajeros automáticos de bancos distintos al emisor de la tarjeta, los montos disponibles para extracción suelen ser inferiores, debido a cuestiones técnicas y acuerdos interbancarios.
Ante este panorama, la recomendación general para los usuarios es verificar los límites específicos aplicables a su cuenta y banco, consultando los canales oficiales de su entidad, especialmente si se prevé la necesidad de retirar sumas importantes de efectivo.
Salario mínimo: Aumento decretado y cuestionamientos
En paralelo a las novedades del sector bancario, el Gobierno Nacional oficializó un nuevo esquema para el Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM), a través de la Resolución 5/2025, publicada el pasado jueves en el Boletín Oficial. La decisión establece incrementos escalonados que se extenderán desde abril hasta agosto de 2025.
Los montos fijados son los siguientes:
- Desde abril de 2025: $302.600 mensuales ($1.513 por hora).
- Desde mayo de 2025: $308.200 mensuales ($1.541 por hora).
- Desde junio de 2025: $313.400 mensuales ($1.567 por hora).
- Desde julio de 2025: $317.800 mensuales ($1.589 por hora).
- Desde agosto de 2025: $322.000 mensuales ($1.610 por hora).
Estos valores son de aplicación para los trabajadores comprendidos en el Régimen de Contrato de Trabajo, el Régimen de Trabajo Agrario, y para el personal de la Administración Pública Nacional y otras entidades estatales.
La determinación gubernamental se produjo después de que el Consejo del Salario, órgano tripartito compuesto por representantes del Estado, las cámaras empresariales y los sindicatos, no lograra alcanzar un consenso durante su reunión del pasado 29 de abril. Ante la falta de acuerdo, el Ejecutivo avanzó con una medida unilateral.
Sin embargo, estos aumentos han sido objeto de duras críticas por parte de diversas organizaciones sindicales y sociales. El principal cuestionamiento radica en la escasa incidencia de la suba frente a la inflación acumulada y el encarecimiento sostenido de la canasta básica. Argumentan que el incremento total, que no alcanza los $20.000 en un período de cinco meses, resulta «irrisorio» y «absolutamente insuficiente» para compensar el aumento mensual en alimentos, servicios básicos y alquileres.
Adicionalmente, la resolución actualizó los parámetros para la prestación por desempleo. El monto de esta prestación continuará calculándose como el 75% de la mejor remuneración neta percibida por el trabajador en los últimos seis meses de su relación laboral, manteniendo un piso del 50% y un tope del 100% del Salario Mínimo, Vital y Móvil vigente.
Desde la perspectiva de los críticos, los nuevos montos del SMVM, lejos de propiciar una recuperación del ingreso real de los trabajadores, confirman una tendencia preocupante: la paulatina pérdida de la función esencial del salario mínimo como un «umbral de dignidad», quedando significativamente por debajo del costo requerido para sostener un nivel de vida básico en la Argentina actual.
Ambas series de medidas, tanto los ajustes en los límites de extracción de efectivo como la fijación del nuevo salario mínimo, se inscriben en un contexto económico desafiante, donde la población debe adaptarse continuamente a nuevas normativas financieras mientras lidia con la presión inflacionaria sobre sus ingresos y su capacidad de ahorro.