Día Mundial del Traductor: ¿por qué se celebra el 30 de septiembre?
Cada 30 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Traductor, una fecha destinada a destacar la importancia de los traductores en la comunicación global. Esta celebración reconoce su rol en la construcción de puentes culturales y lingüísticos, esenciales en un mundo interconectado.
El Día Mundial del Traductor, celebrado el 30 de septiembre, es una oportunidad para reflexionar sobre la vital función que desempeñan los traductores en la sociedad. No se trata solo de convertir palabras de un idioma a otro, sino de transmitir significados, contextos culturales y sutilezas que permiten que los mensajes crucen fronteras sin perder su esencia. En un mundo donde la globalización y la multiculturalidad son cada vez más evidentes, los traductores y sus habilidades se han vuelto fundamentales.
La elección del 30 de septiembre como el Día Mundial del Traductor no es arbitraria. Esta fecha coincide con el día de San Jerónimo, conocido como el santo patrón de los traductores. San Jerónimo fue el responsable de traducir la Biblia del griego y hebreo al latín, una labor monumental que llevó a cabo en el siglo IV. Su trabajo es considerado uno de los más importantes de la historia de la traducción, y desde entonces, San Jerónimo se convirtió en una figura representativa del oficio.
La importancia de los traductores ha crecido exponencialmente con el avance de la tecnología y la expansión de las relaciones internacionales. Las traducciones de documentos legales, científicos, literarios y técnicos son esenciales para la cooperación entre naciones, empresas y personas. Sin embargo, el papel de los traductores va más allá de lo técnico: son guardianes de la cultura. A través de su trabajo, preservan las particularidades y riquezas de las lenguas, evitando que las ideas y las tradiciones se pierdan en la interpretación.
Este reconocimiento anual también es promovido por la Federación Internacional de Traductores (FIT), que desde 1953 busca resaltar la importancia de esta profesión. La FIT ha instado a los gobiernos, instituciones y empresas a valorar y proteger el trabajo de los traductores profesionales. En un mundo donde la inmediatez de la información parece ser primordial, la precisión y el respeto por las diferencias lingüísticas son más importantes que nunca.
El Día Mundial del Traductor es un llamado a apreciar el arduo trabajo de aquellos que facilitan la comunicación entre culturas y sociedades diversas. Este 30 de septiembre no solo celebramos la traducción como un acto técnico, sino como una labor que conecta a las personas, facilita el entendimiento mutuo y promueve la paz en un mundo que necesita más puentes y menos barreras lingüísticas.