Aumenta la ola de despidos: cerradas casi 340.000 cuentas sueldo en el primer cuatrimestre

La crisis económica se refleja en el aumento de despidos y cierre de cuentas sueldo.

La recesión económica en Argentina sigue dejando un rastro de consecuencias negativas, afectando directamente los niveles de empleo y estabilidad laboral en el país. Según un reciente informe del Banco Central de la República Argentina (BCRA), en el primer cuatrimestre de este año se cerraron casi 340.000 cuentas sueldo, una cifra alarmante que evidencia la gravedad de la situación.

El Banco Central informó que solo en abril se cerraron 65.532 cuentas bancarias utilizadas por los trabajadores para recibir sus sueldos. Estos datos, incluidos en el informe mensual de Entidades Financieras, muestran una preocupante tendencia de aumento en el cierre de cuentas sueldo desde diciembre del año pasado. En ese momento, había 10.440.802 cuentas sueldo activas, mientras que en abril de este año el número se redujo a 10.100.959. Esto significa que 339.843 personas dejaron de recibir sus salarios a través de un banco en tan solo cuatro meses.

Los bancos públicos nacionales perdieron 20.410 cuentas sueldo desde diciembre; los públicos provinciales, 120.413; los bancos privados nacionales, 78.658; los de capital extranjero, 94.371; y el Banco Nación, 36.335. La mayoría de estos cierres se atribuyen a despidos en el sector público. Sin embargo, la situación se ha agravado, afectando también a sectores económicos clave como la industria.

El informe del Banco Central detalla que cada mes se registra la cantidad de cuentas sueldo con algún movimiento o acreditación de fondos por parte de los empleadores. La reducción en estos movimientos refleja una clara caída en los niveles de empleo.

El impacto de la crisis se refleja en el aumento del desempleo. Según el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), en el primer trimestre del año el desempleo afectó a 1.100.000 personas. Esta cifra es considerablemente mayor comparada con los 800.000 desempleados que se registraron al finalizar diciembre del año pasado.

El deterioro de los salarios, el aumento de precios y la caída del consumo son factores que contribuyen a esta recesión, creando un círculo vicioso que perjudica tanto a los trabajadores como a la economía en general.

La creciente ola de despidos y el cierre masivo de cuentas sueldo son indicativos claros de una crisis económica que afecta a todos los sectores de la sociedad argentina. La recesión no solo deteriora la capacidad adquisitiva de las personas, sino que también incrementa la incertidumbre laboral y económica. Frente a este panorama, se hace urgente la implementación de políticas que fomenten la recuperación económica y la estabilidad laboral, para evitar que esta tendencia negativa siga en aumento.