Combustibles en alza: Preocupación por nueva suba del precio de la nafta

Pese a la postergación del ajuste impositivo, las compañías petroleras anuncian un aumento del 4% en los surtidores, agravando las preocupaciones sobre el impacto económico en los consumidores argentinos.

La incertidumbre económica se profundiza en Argentina con el anuncio de un próximo incremento en el precio de los combustibles. A pesar de la decisión del Gobierno nacional de posponer la actualización del Impuesto a los Combustibles, se anticipa un alza del 4% en los valores de la nafta y el gasoil, según indican fuentes periodísticas. Esta medida, destinada a compensar las pérdidas por la devaluación y la inflación, genera inquietud entre los ciudadanos y especialistas del sector.

El aumento, que se espera entre en vigencia en la medianoche del miércoles primero de mayo, afectará a las estaciones de servicio de las empresas YPF, Shell, Axion y Puma Energy. Con esta nueva suba, el litro de nafta súper superaría los $870 en la Ciudad de Buenos Aires, mientras que el litro de premium alcanzaría valores superiores a los $1.070, según estimaciones.

El Gobierno nacional había anunciado previamente la postergación de la actualización del Impuesto a los Combustibles, medida que impedirá incrementos en el precio del TLCAN durante mayo. Esta decisión será oficializada mediante un Decreto que se publicará en el Boletín Oficial en las próximas horas, según informó la Oficina de Prensa de Presidencia.

Según un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal, de no haber diferido la actualización, el impuesto a los combustibles debería haber aumentado un 53% el 1 de mayo. Esto podría haber implicado un incremento del 8% en el precio de la nafta súper en la Ciudad de Buenos Aires y un 7% en Córdoba.

La preocupación se agrava ante las proyecciones futuras del impuesto. Con la postergación de la actualización de mayo, se incorporaría la inflación de 2023. Luego, a principios de julio, el impuesto deberá ajustarse según la inflación IPC del primer trimestre de 2024, lo que podría resultar en un nuevo aumento del 51,6%. .

El anuncio de un nuevo aumento en el precio de los combustibles agrega presión a la economía de los argentinos, ya afectada por la inflación y la devaluación. Si bien la postergación del ajuste impositivo alivia momentáneamente la situación, las proyecciones futuras sugieren un escenario desafiante para los consumidores y las empresas. Ante este panorama, el Gobierno y los actores del sector deberán buscar soluciones equilibradas que mitiguen el impacto en los bolsillos de los ciudadanos y promuevan la estabilidad económica a largo plazo.