Alergia al huevo, un desafío para los más pequeños
La alergia al huevo es una de las más frecuentes en la infancia, afectando a alrededor del 2% de los niños. Se caracteriza por una reacción del sistema inmunitario ante las proteínas del huevo, que puede desencadenar diversos síntomas, desde leves hasta graves.
¿Qué es la alergia al huevo?
Es una respuesta anormal del sistema inmunitario a las proteínas presentes en el huevo, principalmente en la clara. Cuando un niño alérgico al huevo consume este alimento, su cuerpo libera sustancias químicas como la histamina, que provocan los síntomas de la alergia.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas de la alergia al huevo pueden variar en severidad y tipo. Algunos de los más comunes son:
- Síntomas leves: urticaria (ronchas), picazón en la piel, eczema, inflamación de la boca o la garganta, vómitos, diarrea.
- Síntomas moderados: dificultad para respirar, sibilancias, tos, estornudos, mareos.
- Síntomas graves: anafilaxia, una reacción alérgica grave que puede ser potencialmente mortal.
¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico de la alergia al huevo se realiza mediante una combinación de pruebas, como:
- Historial médico: el médico preguntará sobre los síntomas del niño, su relación con el consumo de huevo y la existencia de antecedentes familiares de alergia.
- Pruebas cutáneas: se pinchan pequeñas cantidades de extracto de huevo en la piel del niño para observar si hay una reacción alérgica.
- Análisis de sangre: se miden los niveles de anticuerpos IgE específicos contra el huevo en la sangre del niño.
¿Cómo se trata?
El tratamiento principal para la alergia al huevo es la evitación estricta del huevo en todas sus formas. Esto incluye:
- Leer cuidadosamente las etiquetas de los alimentos para identificar la presencia de huevo.
- Informar sobre la alergia al niño en la escuela, guardería o cualquier otro lugar donde pueda comer.
- Tener siempre a mano un autoinyector de epinefrina en caso de anafilaxia.
En algunos casos, la alergia al huevo puede desaparecer con el tiempo. Se recomienda consultar con un médico especialista en alergias para realizar un seguimiento periódico y evaluar la posibilidad de una reintroducción del huevo en la dieta del niño.
Qué es la alergia al huevo y cómo se trata
La alergia al huevo es una reacción del sistema inmunitario a las proteínas del huevo. Los síntomas pueden variar desde leves hasta graves. El tratamiento principal es la evitación estricta del huevo en todas sus formas.
Consejos para padres:
- Lea atentamente las etiquetas de los alimentos.
- Informe sobre la alergia al niño en la escuela, guardería o cualquier otro lugar donde pueda comer.
- Tenga siempre a mano un autoinyector de epinefrina en caso de anafilaxia.
- Consulte con un médico especialista en alergias para realizar un seguimiento periódico y evaluar la posibilidad de una reintroducción del huevo en la dieta del niño.
La alergia al huevo puede ser una condición desafiante para los niños y sus familias. Sin embargo, con un manejo adecuado, la mayoría de los niños pueden llevar una vida normal y saludable.