Bolsillos vapuleados: Aumenta el precio de la garrafa en medio de la espiral inflacionaria

La Secretaría de Energía anuncia una "actualización excepcional" del precio máximo de referencia de la garrafa, elevándolo a $7,700 para la de 10 kg. ¿Protección o golpe al bolsillo?

La crisis económica se cierne sobre los hogares argentinos, y esta vez el impacto llega al suministro de gas. La Secretaría de Energía, en un intento por poner orden en el mercado de Gas Licuado de Petróleo (GLP), ha emitido una resolución que actualiza excepcionalmente el precio máximo de referencia de la garrafa. La medida, enmarcada en el decreto DNU 70/23, establece un nuevo costo de $4,752, que, sumando impuestos y costos adicionales, se traduce en un desembolso final de alrededor de $7,700 para la garrafa de 10 kg.

Este incremento, según fuentes oficiales, busca contrarrestar los desmedidos precios que imperan en el mercado informal de garrafas, donde los valores llegan a cifras exorbitantes entre $9,000 y $12,000. La Resolución 11/2024 fija límites oficiales para garrafas de 10 kg, 12 kg y 15 kg.

La Secretaría de Energía insiste en que no se trata de un aumento, sino de una medida destinada a salvaguardar a los sectores más vulnerables de los abusos del mercado. A través de un comunicado, argumentan que la desregulación del mercado de precios de GLP tiene como fin impulsar la eficiencia económica y fomentar la inversión, creando una competencia que elevará el mercado local de GLP a estándares internacionales.

La justificación oficial apunta a la necesidad de reflejar los costos reales de la producción y comercialización de GLP, asegurando la prestación del servicio con los estándares de calidad y seguridad necesarios. Sin embargo, la pregunta persiste: ¿Se trata realmente de una protección a los consumidores o de un nuevo golpe a los bolsillos ya vapuleados por la creciente inflación? La incertidumbre económica se suma a la preocupación diaria de los ciudadanos argentinos.