La implacable erosión del poder adquisitivo: La clase media, en niveles de caída sin precedentes

La clase media enfrenta una caída del poder adquisitivo sin precedentes, resultado de la escalada de precios que no encuentra contrapartida en un incremento de ingresos. El deterioro económico se manifiesta en una reducción del 50% al 80% en el poder de compra de este segmento, generando impactos significativos en diversos aspectos de la vida cotidiana.

Desglose del deterioro

La inflación, un fenómeno que afecta a todos los estratos sociales, golpea con especial dureza a la clase media. Esta pérdida de ingresos reales se traduce en una marcada disminución de las ventas en los principales centros comerciales, donde la caída alcanza el 10% según el relevamiento de Scentia. Las transacciones con tarjetas de crédito también experimentan un declive, exacerbado por la falta de ajuste en los ingresos.

Estudios reveladores

Consultoras como First Capital Group arrojan luz sobre la profundidad de la recesión. La disparada de precios, descompensada por la suba de ingresos, se refleja en la disminución de las compras con tarjetas de crédito. A pesar de un incremento nominal del 11,1% en el movimiento financiero con tarjetas, los precios se elevan alrededor del 20% en el mismo período, exacerbando la brecha económica.

Esperanzas en el plan cuota simple

El mercado alberga expectativas en el recién implementado plan Cuota Simple, que busca estimular las ventas con tarjetas mediante cuotas subsidiadas. Su efectividad se vislumbra como un factor clave para mejorar la perfomance y contrarrestar la caída observada.

Préstamos y poder adquisitivo

Los préstamos al sector privado, aunque registran un aumento interanual, quedan rezagados frente a la estimada inflación del período, que ronda el 250%. Este fenómeno se traduce en una pérdida de poder adquisitivo que oscila entre el 50% y el 80%, dependiendo del sector medio y su canasta de consumo específica.

Impacto en el comercio

Las pequeñas empresas y comercios, representados por la CAME, informan una drástica caída del 28,5% en las ventas durante enero. Una evaluación de la consultora 1816 revela que la retracción abarca diversos sectores, desde automóviles y motos hasta despachos de cemento y ventas minoristas, señalando un deterioro económico generalizado.

Desplome histórico en las ventas de alimentos

El informe de 1816 destaca un desplome histórico del 37,1% interanual en las ventas de alimentos en pequeños comercios durante enero. Esta caída supera incluso las cifras registradas durante la crisis de 2001, evidenciando la magnitud del desafío económico que enfrenta la sociedad.

En este contexto, la clase media se ve sumida en una realidad económica cada vez más compleja, donde el ajuste de ingresos no acompaña el vertiginoso aumento de precios, generando una preocupante disminución del poder adquisitivo y un impacto generalizado en la actividad comercial y financiera.