Día del Hombre y la Mujer del Tiempo: ¿por qué es el 5 de febrero?

La conmemoración de un pionero: La historia detrás de la elección del 5 de febrero como el Día del Hombre y la Mujer del Tiempo.

Cada 5 de febrero, el mundo celebra el Día del Hombre y la Mujer del Tiempo, una jornada dedicada a honrar el legado de John Jeffries, reconocido como el primer meteorólogo de la historia. Su contribución marcó el inicio de una disciplina crucial que ha evolucionado hasta convertirse en un componente esencial de los noticieros contemporáneos. Veamos cómo este físico estadounidense, nacido un 5 de febrero en 1744, dejó una huella imborrable en el campo de la meteorología.

El Legado de John Jeffries: John Jeffries, físico, científico y cirujano militar, no solo desempeñó un papel destacado en la medicina, sino que también dejó una marca indeleble en el estudio del clima. Su incansable observación diaria del tiempo en Boston sentó las bases para la evolución de la meteorología como ciencia. No se detuvo ahí; Jeffries llevó sus investigaciones a nuevas alturas literalmente al determinar el tiempo en Londres desde un globo a 3.000 metros de altura. Equipado con un termómetro, un barómetro y un higrógrafo para medir la humedad del aire, este pionero abrió la puerta a un enfoque más preciso en la predicción del clima.

La Evolución de la Meteorología: Si bien Jeffries dejó una marca perdurable, la observación de los fenómenos atmosféricos tiene raíces antiguas. En el antiguo Egipto, se asociaban los ciclos de la crecida del Nilo con los movimientos de las estrellas, vinculándolos al supuesto enfado de los dioses. Fue en la Grecia antigua donde el término «meteorología» fue acuñado, gracias a la obra de Aristóteles, quien en su publicación ‘Meteorológica’, allá por el año 340 a. C., sentó las bases para entender los patrones climáticos.

La tarea actual: presentando el pronóstico del tiempo: Hoy en día, la figura del Hombre o la Mujer del Tiempo es una presencia constante en los noticieros locales. Periodistas, meteorólogos o locutores especializados se encargan de informar sobre la presión atmosférica, el viento, la temperatura, la humedad y la nubosidad. Esta sección, ahora integral en la programación televisiva, es la continuación del legado de Jeffries, fusionando la ciencia con la comunicación para mantenernos informados sobre las complejidades del clima.

Conclusión: El 5 de febrero se erige como un tributo a John Jeffries y a todos los profesionales del tiempo que, a lo largo de los años, han llevado adelante su legado. Más que una efeméride, el Día del Hombre y la Mujer del Tiempo nos recuerda la importancia de comprender y anticipar los caprichos de la atmósfera, un arte que, gracias a Jeffries y aquellos que lo sucedieron, sigue evolucionando con cada nueva predicción.