¿Cómo evitar que tu gato siga subiendo a tu cama?
Entre los malos hábitos que en ocasiones tienen nuestras mascotas, está el de subir a nuestra cama. ¿Cómo puedes evitar que tu gato siga subiendo a tu cama?
A todos los gatos les encanta dormir en la cama de sus dueños, porque allí está su olor y las ropas están impregnadas con sus feromonas, y eso es algo que no lo pueden resistir. Pero si no quieres que tu gato se suba a tu cama porque eres alérgico, porque no te deja dormir o porque, sencillamente, no te parece higiénico, presta atención a los siguientes consejos para evitarlo.
Consejos para evitar que tu gato se suba a la cama
Estas pautas te ayudarán a eliminar los malos hábitos en tu mascota:
Hazle entender a tu gato que tiene su propia cama para dormir. Todas y cada una de las veces que lo veas en la cama, tendrás que sacarlo y demostrar que no quieres que esté allí.
- Cuando le veas a punto de subirse a la cama, dile que no lo haga. Si no te obedece, tendrás que acercarte a él, tomarlo en brazos suavemente y dejarlo en su propia cama.
- Adquiere una camita especial para gatos. Para que se acostumbre a ella, coloca dentro alguna de tus prendas, porque tu olor le tranquilizará. También es recomendable que dejes en la camita alguno de sus juguetes preferidos.
- Otra forma efectiva, aunque no muy simpática, para evitar que tu gato se suba a la cama, es haciendo ruidos que no le gusten. Puedes usar una campana o una pequeña lata con algunas monedas dentro y hacerla sonar cuando le veas que está por subirse a la cama.
¿Cómo evitar que tu gato se suba a la cama de sus dueños?
- Lo primero que debes hacer para que tu gato no se acueste en tu cama es no fomentar ese comportamiento.
- Cuando se adopta a un gato es normal permitirle que descubra los rincones de la casa, y es en ese tiempo, que debe prohibírsele que suba a la cama. Si en los primeros meses de edad acostumbras a tu gatito a dormir en su propia cama, ya no dejará de hacerlo, porque lo tendrá incorporado a su rutina y es poco probable que la modifique.
- Ofrécele a tu gato un ambiente estimulante y en donde pueda encontrar cosas para hacer. Coloca algún rascador estratégicamente ubicado y deja alguno de sus juguetes aquí o allá, que su curiosidad hará el resto.
- El refuerzo positivo es la forma más segura y eficaz de inculcar buenos hábitos a tu mascota. Cada vez que consigas que tu gato te obedezca, recompénsalo y no solo con alimentos, ofrécele algún juguete o acarícialo y háblale suavemente, pues él aceptará gustoso ese trato amable.
La importancia del lugar de descanso
Debes considerar la calidad de la cama del gato para asegurar su descanso apropiado, dado que los gatos duermen hasta 16 horas al día. Aunque no suelan permanecer todo el tiempo en su cama, esta debe proporcionar comodidad y un espacio exclusivo para el animal, permitiéndole sentirse cómodo y seguro con su propio olor impregnado en ella.
Esto satisface la naturaleza independiente y, a veces, solitaria del gato, a pesar de brindarnos compañía y afecto. La edad del gato también es crucial: para gatos jóvenes, puedes elegir una cama con juguetes colgantes, mientras que para gatos mayores o con problemas de movilidad, una cama ortopédica puede ser más adecuada.
La cama debe ser ligeramente más grande que el animal para permitirle estirarse cómodamente y tener espacio adicional a su gusto. La postura de dormir del gato, si es estirada o más acurrucada, y sus preferencias de altura (si le gusta estar elevado o cerca del suelo), son consideraciones importantes al elegir el tamaño y la forma de la cama.