Investigarán a los jueces que actuaron en el doble crimen de las turistas francesas

 

El diputado provincial salteño de Juntos por el Cambio, José Gauffin, pidió el jury de enjuiciamiento contra los integrantes de la Sala III del Tribunal de Impugnación, Luciano Martini y Rubén Arias Nallar, que condenaron a prisión perpetua a Clemente Vera, quien tras estar preso casi once años fue liberado por la Corte Suprema de Justicia.

Un diputado provincial salteño pidió el jury de enjuiciamiento contra los jueces de la Sala III del Tribunal de Impugnación de Salta que condenaron a prisión perpetua a Clemente Vera en la causa por el doble crimen de las turistas francesas ocurrido en 2011, y que tras estar preso durante casi once años fue liberado hace 15 días por decisión la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

“Hace unos días, en virtud del fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, se liberó a Santos Clemente Vera. Ese fallo es una enorme reprimenda al Poder Judicial de Salta”, dijo el diputado de Juntos por el Cambio, José Gauffin, en declaraciones a medios salteños.

El legislador apuntó que el viernes pasado presentó el pedido de jury de enjuiciamiento contra los jueces del Tribunal de Impugnación.

20231212 Santos Clemente Vera

Se trata de los jueces de la Sala III del Tribunal de Impugnación de Salta, Luciano Martini y Rubén Arias Nallar, que en febrero de 2016 condenaron a Vera en segunda instancia, a la pena de prisión perpetua, por la causa de las turistas francesas Cassandre Bouvier y Houria Moumni, asesinadas en julio de 2011.

Para Gauffin, las consecuencias de este fallo “no deberían ser solamente la liberación de Vera” y consideró que “es importante que haya un análisis profundo y una revisión de lo actuado en la justicia provincial, para que no vuelva a ocurrir que una persona esté presa durante casi once años por un error procesal”.

Luego, señaló que el Tribunal de Impugnación “se arrogó una facultad que no le correspondía”, ya que, al resolver la apelación de la absolución de Vera en el juicio por el doble crimen, decidió hacer lugar al pedido y condenarlo a prisión perpetua, en vez de anular el fallo y pedir un nuevo juicio, por lo que incurrió en una «violación del Código Procesal Penal de la provincia».

El 11 de diciembre pasado, tras más de seis años de espera, Vera recuperó la libertad por orden de la Corte de Justicia de esa provincia, que se basó en el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que el 7 de diciembre dejó sin efecto la sentencia a prisión perpetua que se le había dictado en 2016.

La Corte Nacional dispuso que «se hace lugar a la queja, se declara procedente el recurso extraordinario y se deja sin efecto la sentencia apelada».

A la hora de resolver, los magistrados tuvieron en cuenta el pedido del procurador general de la Nación, Eduardo Casal, quien en 2020 emitió un dictamen en el que opinó que «corresponde hacer lugar a la queja interpuesta» y «declarar parcialmente admisible el recurso extraordinario».

Por los crímenes de Bouvier y Moumni, la Sala II del Tribunal del Juicio salteña condenó por unanimidad, el 2 de junio de 2014, a Gustavo Lasi a la pena de 30 años de prisión como autor del «robo calificado por el uso de arma, abuso sexual con acceso carnal agravado, y doble homicidio calificado criminis causa».

El tribunal también condenó a Omar Darío Ramos y Antonio Eduardo Sandoval a la pena de dos años de prisión condicional por encubrimiento calificado, mientras que a Daniel Vilte Laxi y a Vera -que ya habían estado detenidos tres años en esa instancia- los absolvió por el beneficio de la duda y quedaron en libertad.

Sin embargo, el 3 de febrero de 2016, la Sala III del Tribunal de Impugnación de Salta revocó la sentencia absolutoria dictada a Vera y lo condenó a prisión perpetua por considerarlo coautor de los mismos delitos que Lasi, por lo que la defensa recurrió a la Corte de la provincia, que no hizo lugar a la apelación.

En tanto, la organización Innocence Project -creada en los Estados Unidos y cuyo fin es revertir condenas de personas inocentes- comenzó a patrocinar a Vera desde 2017 y tramitó el recurso de queja contra de la denegación del recurso extraordinario decidida por la Corte de Justicia de Salta en ese año.

En ese recurso presentado hace más de seis años, la defensa de Vera solicitó que se ordene un nuevo juicio debido a que no fue escuchado por el tribunal de segunda instancia y por considerar que existieron irregularidades en la prueba genética en la que se basaron los jueces que lo condenaron.

Finalmente, la Corte nacional hizo lugar al planteo de la defensa y dispuso que «se dicte un nuevo fallo».

El padre de una de las víctimas, Jean Michel Bouvier, apoyó a Vera desde el primer momento, por considerarlo inocente, y tras conocer el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que derivó en su liberación, aseguró desde Francia, a través de un audio al que Télam tuvo acceso, sentirse «muy feliz» por la decisión del máximo tribunal salteño, aunque expresó «rabia» por la demora del Poder Judicial.

Los cuerpos de Cassandre y Houria fueron hallados el 29 de julio de 2011 en la Quebrada de San Lorenzo, a 15 kilómetros del centro de la capital de esa provincia, con signos de haber sido golpeadas, abusadas y asesinadas a tiros.

Las jóvenes habían sido vistas por última vez con vida el 15 de julio, cuando fueron a recorrer el circuito turístico y sus cuerpos fueron encontrados dos semanas después, cerca del sendero principal de El Mirador.

El doble crimen tuvo lugar cuando ambas estaban de vacaciones en la ciudad de Salta y conmocionó a la provincia, causando una amplia repercusión nacional e internacional.

Los forenses determinaron que ambas turistas habían sido abusadas sexualmente y asesinadas de un disparo cada una con una escopeta Bataan calibre 22.

Vera era baqueano en la zona de San Lorenzo y cuando fueron hallados los cuerpos de las turistas francesas se ofreció a guiar a los policías hasta el lugar del hallazgo, pero luego, Lasi confesó que él mismo cometió el hecho, aunque involucró a Vera y a Vilte Laxi, de quienes dijo que ellos lo obligaron y lo amenazaron con armas para que las matara.