¡La mascota más fiel del mundo! Perrito recorre 380 km para volver a casa

 

El perro se perdió en unas vacaciones en Saboya, pero logró regresar a pesar de la distancia que tuvo que recorrer para encontrarse con sus dueños.

A lo largo de la historia se ha dicho que el perro es el mejor amigo del hombre, pero ¿qué tan cierto es esto? En esta ocasión un perrito dejó claro que cuando se ama a sus dueños pueden recorrer un sinfín de kilómetros para poder encontrarse con su familia. Esto sucedió en Saboya, cuando un cachorro se perdió durante las vacaciones y tuvo que recorrer cerca de 400 km para regresar a casa.

La noticia se volvió viral, ya que, a pesar de la distancia, el pequeño jagdterrier de dos años logró encontrar el camino a casas para encontrarse con su familia en casa; pero cómo fue que el perro se perdió en un viaje a Italia.

Catherine y Roger son una pareja de 60 años que viven en Francia, pero decidieron hacer un viaje a Italia en autocaravana, el problema ocurrió durante una parada en Saint Maritin de Belleville, ya que durante eta parada el perro salió del auto a pasear un rato, pero al regresar ya no estaba el auto donde lo habían dejado, esto según información de France Bleu.

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Lo dieron por perdido
El portal francés relata que la pareja esperó al perro durante horas, pero al no encontrarlo decidieron regresar a casa, pero antes de hacerlo decidieron levantar la denuncia para después ir a casa de unos familiares cercanos, esto con la intención de no estar lejos de la zona por si les hablaban para dar noticias sobre su mascota.

La sorpresa llegó uno días después cuando recibieron una llamada de un amigo, mismo que estaba igual de sorprendido que Catherine y Roger, ya que cuando daba una vuelta para ver que todo estuviera bien en la casa de sus amistades se llevó la sorpresa que Pablo se encontraba en la zona.

El amigo relató que el perro se encontraba desmejorado y en mal estado, pero cuando lo vio fue un momento de felicidad. La moraleja para la pareja de 60 años fue que después de este viaje tenían que comprar un collar con GPS por si se volvía a perder lo pudieran encontrar.