Quince años de prisión para un hombre que atacó a su expareja con una maza de albañil

Un hombre fue condenado hoy a 15 años de prisión por intentar asesinar a su expareja con una maza de albañil , informaron fuentes judiciales.

Se trata de Luis Rondón, quien fue encontrado culpable del delito de homicidio en grado de tentativa triplemente agravado por el vínculo, alevosía y por mediar violencia de género, en perjuicio de Fátima Aparicio.

El Tribunal, integrado por los jueces Alicia Beatriz Freidenberg, Stella Maris Arce y Eduardo Romero Lascano condenó a Rondón a 15 años de prisión, la pena máxima posible por un intento de femicidio.

«Esta es la primera sentencia en Tucumán que recepta la figura de femicidio en grado de tentativa», sostuvo la secretaria de Derechos Humanos de Tucumán, Érica Brunotto, quien destacó que desde su cartera ejercieron “la querella de Fátima desde el primer momento, durante el debate oral y hasta la sentencia».

Aparicio, en tanto, manifestó al ser consultada por los medios locales tras conocerse la sentencia, que se trata de “un fallo ejemplar que enciende una luz de esperanza para las víctimas de agresores y femicidas, quienes deben entender que hay personas dispuestas a ayudarlas para que puedan salir adelante y vivir en paz».

La mujer indicó que a partir de ahora va a “sacar el paréntesis” que puso en su vida, ya que podrá ir a buscar a su hija para que vivan “otras vez juntas», y adelantó que encabezará los reclamos por justicia para las mujeres que son víctimas de agresiones y abusos, ya que necesitan “mayor celeridad para tratar los casos de violencia».

«Tengo pensado montar en mi pequeño hogar un lugar para dar cursos y charlas que puedan ser utilizadas como herramientas por las mujeres que viven bajo la amenaza de agresores y femicidas, ya que todas merecen salir de esa situación y construir una nueva vida», agregó.

El juicio, que comenzó la semana pasada y finalizó hoy, se realizó bajo modalidad mixta ya que los testigos y el imputado -junto a su abogado defensor- participaron desde salas ubicadas en la sede judicial que fueron especialmente acondicionadas, mientras que el Tribunal y el resto de las partes lo hicieron en forma remota.

Durante los alegatos, Rondón pidió perdón y dijo que no quiso matar a su expareja, aunque admitió que la golpeó con el martillo sin la fuerza o violencia que se le imputa ya que «si hubiese querido matarla ella hoy no estaría acá».

En mayo de 2019, Aparicio fue atacada brutalmente a mazazos por Rondón en su departamento de Bernabé Aráoz al 100 de Tucumán, pero según su testimonio los vecinos le salvaron la vida.

«Esa mañana entré a bañarme y él salió desde atrás de la cortina; corrí a pedir ayuda a los vecinos pero me alcanzó y me arrastró desde la entrada hasta la cocina, donde intentó asfixiarme», narró sobre lo sucedido.

«Como no podía hacerme callar comenzó a golpearme», sostuvo la víctima cuando pudo declarar después de haber permanecido internada en estado de coma durante casi un mes.

El acusado fue detenido y se le dictó la prisión preventiva hasta el desarrollo del juicio, que finalizó hoy con una condena de 15 años.

En junio de este año su abogado solicitó a la Justicia el cese de la prisión preventiva o el beneficio de prisión domiciliaria debido a la pandemia, pero la Sala VI de la Cámara Penal resolvió que el agresor continuara preso en el penal de Villa Urquiza.

Aparicio fue representada legalmente por el Cuerpo de Abogados para Víctimas de Violencia contra la Mujer de la Secretaría de Derechos Humanos, dependiente del Ministerio de Gobierno y Justicia de Tucumán.