Informe de la UNGS sobre la cuarentena en los barrios del conurbano
Un equipo del Instituto del Conurbano (ICO) de la Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS) elaboró un informe a partir de un relevamiento realizado en barrios del conurbano bonaerense respecto al “aislamiento social preventivo obligatorio” establecido por decreto por el Gobierno Nacional ante la pandemia del coronavirus.
El equipo de investigadores e investigadoras, docentes, graduados y graduadas y estudiantes del ICO entrevistó el 23 y 24 de marzo a referentes barriales y comunitarios en su mayoría del municipio de Moreno. También se realizaron consultas a referentes de José C.Paz, San Miguel, La Matanza, Malvinas Argentinas, Morón, Hurlingham, Ituzaingó, Tigre, General San Martín, Quilmes, Lomas de Zamora, Zárate y General Rodríguez.
Del relevamiento realizado por el ICO, se observa que el acatamiento de la medida fue “muy alto” o bien “parcial” (más del 40% en cada caso). El cumplimiento de la medida dispuesta por el Gobierno Nacional fue vinculada al control policial, la existencia de hogares con empleos formales y las mejores condiciones de vivienda.
En menos del 15% de los barrios, se informó un muy bajo nivel de acatamiento. Respecto a este último dato, algunos de los factores argumentados por las personas entrevistadas fue el tamaño y las condiciones deficitarias de la vivienda y la falta de disponibilidad de provisión de agua por cañería dentro de la misma, que obliga a la población a salir para su aprovisionamiento, así como la imposibilidad de comprar alimentos para varios días debido a la falta de ingresos acumulados.
El bajo acatamiento también se atribuyó a factores que remiten a las formas culturales de uso del espacio en estos barrios y además a la importante cantidad de cuentapropistas, que ven comprometido el sustento básico de la familia e intentan lograr una “changa” aún en el marco de la pandemia. Otros factores están vinculados a creencias respecto de la pandemia y las medidas para enfrentarlas: los y las informantes consideraron que hay familias que no creen que el virus llegará a los barrios o que consideran que el aislamiento es para “la clase media”.
El informe también hace referencia a cómo se informa y comunica la población y al respecto se indica que gran parte de los referentes consultados consideró que la población está informada sobre la pandemia.
Por otro lado, el trabajo revela información sobre lo que ocurrió con el nivel de actividad en distintos rubros y, respecto a los problemas surgidos o agravados a partir del aislamiento, se indica que la principal preocupación es la discontinuidad de los ingresos laborales familiares. La provisión de alimentos y, en menor medida, de artículos de limpieza, fue otro de los problemas mencionados.
En cuanto a la salud, se mencionaron dificultades para obtener recetas y medicamentos y el cierre de servicios habituales que discontinúa la atención de enfermedades crónicas u otras no vinculadas al coronavirus. La situación de los adultos mayores, especialmente aquellos que viven solos, también genera una importante preocupación, de acuerdo al trabajo. Además se menciona que el aislamiento agravó las situaciones de violencia de género o familiar. La extensión de la cuarentena, según las personas encuestadas, genera preocupaciones en relación a un empeoramiento de los problemas registrados en los primeros días.
El análisis fue elaborado por Verónica Maceira y los relevamientos estuvieron a cargo de Viviana Colella, María Eugenia Jaime, Cristina Cravino, Eduardo Reese, Carolina Barnes, Anabella Zamora, Bárbara Couto, Emanuel López Méndez, Verónica Maceira, Ana Luz Abramovich, Gonzalo Vázquez, Silvia Ebis, Jesús Ebis y la Red de organizaciones de Cuartel V.
Fuente: Universidad Nacional de General Sarmiento