Si bien viven con el temor de pasar a una cárcel común, un guardia del servicio penitenciario contó que se quejan de las condiciones de la celda en donde se encuentran con palabras sumamente discriminatorias: «Nos tienen como negros de mierda en este lugar. No nos respetan. No nos dan los derechos que tenemos. Vivimos como ratas» fue el textual que dejó trascender el guardia.

También contó que provocan a los guardias con palabras ofensivas: «Vos trabajás para mí. Yo te pago el sueldo. Hacé lo que te digo porque sos mi empleado», dijo uno de los asesinos de Fernando a los agentes penitenciarios.

Sin dudas, su pertenencia a familias de alto poder adquisitivo en Zárate, hace que no puedan ubicar la situación real en la que se encuentran.