Viaje a los Pueblos Fumigados se estrenará se estrenará el 5 de mayo
Luego de ser aclamada en el 68th Berlin International Film Festival
Sección Berlinale Special y de participar en el 36 Festival Cinematográfico de Uruguay y el Festival Internacional de Cine Independiente de Buenos Aires, la película de Pino Solanas llega a su estreno comercial en Argentina.
Viaje a los pueblos fumigados es un viaje de investigación del autor por siete provincias argentinas sobre las secuelas sociales y ambientales que dejó el modelo transgénico con agrotóxicos. Argentina fue considerada uno de los graneros del mundo y producía en suelos y pasturas naturales. Hoy, para lograr mayor volumen exportador, produce granos, carnes y alimentos con agrotóxicos y sustancias químicas.
La mayor rentabilidad del agro se está haciendo a costa de la deforestación, el monocultivo, la destrucción del suelo, inundaciones y éxodos rurales. La contaminación que produce el glifosato y las fumigaciones multiplica los casos de cáncer y malformaciones. El film se desarrolla con historias y testimonios dramáticos de sus protagonistas: pobladores, chacareros e investigadores. La eco-agricultura muestra que se puede producir alimento para todos, libre de pesticidas: sano, natural y redituable.
Según su autor, Fernando “Pino” Solanas “las consecuencias sociales del cultivo intensivo de soja transgénica con agrotóxicos, fueron el desmonte de millones de hectáreas de monte nativo, monocultivo, éxodo rural. La población quedó expuesta a la contaminación de las fumigaciones. El control sanitario en nuestro país es inexistente porque no se controlan los centros de producción. Tampoco hay programas de investigación en hospitales y universidades sobre sus efectos en el organismo. Los testimonios recogidos demuestran que una parte de la población está contaminada con agrotóxicos, a lo que se suman los efectos nocivos de alimentos producidos con sustancias químicas: conservantes, colorantes, antibióticos, hormonas”.
“Hoy se produce con pesticidas no solo cereales, sino hortalizas y frutas. La más inocente ensalada ha sido rociada con 10 a 15 pesticidas y no hay control. La publicidad “vende” los alimentos por lo que aparentan y no por lo que son. Se compra por lo que se ve y se consume sin saber lo que se come. Aunque se coma en casa, el peligro de contaminarse existe porque nadie sabe qué está comiendo ni cómo o con qué se hizo», destaca el autor de la película que se estrena el 5 de mayo.