Miles de evacuados y al menos 119 muertos por inundaciones en Bangladesh

Al menos 119 personas han perdido la vida por deslizamientos de tierra provocados por las fuertes lluvias en el sureste de Bangladesh. Se espera que la cifra siga creciendo según vayan llegando las autoridades a todas las zonas afectadas, misión que está dificultando el mal tiempo.

Los distritos más golpeados por las lluvias de los últimos tres días son los de Rangamati, Bandarban y Chittagong, en los que se han registrado víctimas mortales. La comunicación y las vías de acceso se encuentran cortadas en varias áreas, lo que está complicando las labores de rescate, que se encuentran todavía en marcha.

Cada año las lluvias del monzón golpean con fuerza esta región del mundo provocando deslizamientos e inundaciones que siempre se saldan con muertos, heridos, desaparecidos, evacuados y miles de hogares destruidos. En la región de Chittagong, hace ahora diez años, 126 personas murieron por deslizamientos de tierra similares a los que se viven estos días en la misma zona.

Hace escasas semanas el ciclón Mora dañó seriamente los campamentos de rohingyas que están instalados en el sureste de Bangladesh y en los que viven más de 300.000 personas. Ocho personas murieron y miles de casas desaparecieron del mapa.

Desde aquella tormenta tropical, decenas de pescadores bangladesíes permanecen desaparecidos. Se activó una operación de búsqueda marítima (en la que participó India) que consiguió rescatar a más de 70, pero un número incierto que va desde el medio centenar hasta casi el doble según diversas fuentes, sigue en paradero desconocido.

El ciclón Mora llegó a la bahía de Bengala días después de que en Sri Lanka, isla del Índico, las fuertes lluvias provocas en inundaciones y deslizamientos de tierra que acabaron con la vida de más de 200 personas.

En Assam, estado al noreste de India que hace frontera con Bangladesh, a principios de junio unas 60.000 personas se vieron afectadas por las inundaciones provocadas por las intensas precipitaciones.

A pesar de que todos ellos son incidentes que se repiten de forma anual por estas fechas, las autoridades de los diferentes países no consiguen contrarrestar los estragos de unos fenómenos meteorológicos marcados en el calendario. Así, cada año se registran centenares de muertos, miles de hectáreas de cultivo perdidas y numerosos daños materiales. Y la temporada del monzón sólo acaba de comenza