Estados Unidos deportó a una madre mexicana que llevaba más de 20 años en el país y se convirtió en un ejemplo

La policía de inmigración de Estados Unidos (ICE) deportó este jueves a México a una mujer mexicana que vivía en Arizona. Esta no es una deportación más porque, su caso es tomado como un ejemplo de los defensores de los inmigrantes ante las nuevas normas de deportación que ha dictado la administración del presidente Donald Trump. La mujer de 36 años llevaba más de dos décadas en el país y tenía dos hijos ciudadanos norteamericanos.

Según informó la policía fronteriza, García de Rayos había sido condenada en 2009 por poseer documentación falsa, algo habitual entre inmigrantes indocumentados para poder trabajar. La orden de expulsión basada en esa condena se hizo firme en 2013. Desde el juicio, García de Rayos tenía que presentarse cada seis meses en la oficina de ICE para reportar su situación.
El miércoles, la visita rutinaria acabó en una detención para proceder a deportarla. Tras la detención, decenas de personas se concentraron en la comisaría de ICE en Phoenix para protestar y tratar de impedir la deportación. Las imágenes que publicaron en redes sociales muestran a personas bloqueando el paso al furgón en el que se encontraba detenida García.

Guadalupe García se convirtió así este jueves en un nuevo rostro de las críticas a la política de inmigración de Donald Trump, en este caso en cuanto a los indocumentados. El veto migratorio, denunciado en los tribunales, también ha tenido símbolos como los hermanos yemeníes Tareq y Amar Aziz, detenidos en el aeropuerto de Dulles cuando tenían visados para entrar, o el iraní Ali Vayeghan, detenido en el aeropuerto de Los Ángeles cuando iba a visitar a sus familiares con un visado que le había costado 10 años conseguir.

Las autoridades de Phoenix y del sur de Arizona alzaron su voz este jueves contra la deportación. El alcalde demócrata de la ciudad, Greg Stanton, dijo que el caso era «una farsa”. «En vez de buscar criminales violentos y traficantes de drogas, ICE gasta su energía en deportar a una mujer con dos hijos norteamericanos que ha vivido aquí más de dos décadas y no es una amenaza para nadie”. El congresista Rubén Gallego calificó lo sucedido de «tragedia”.

Se calcula que en Estados Unidos viven alrededor de 11 millones de personas de forma ilegal. El año pasado fueron deportadas 240.255 personas fueron deportadas. De ellas, el 58% habían sido condenadas por un delito. De las que no, el 95% son personas rechazadas en la frontera o al lado de la frontera. Según las estadísticas de ICE, el 99,3% de los deportados cumple con las normas del departamento sobre prioridades de deportación, que establecen que los recursos de esta fuerza policial se deben concentrar en deportar criminales convictos y personas que supongan un peligro.