¿Omar Mateen era habitué del boliche gay de la masacre?
El hombre que mató a 49 personas en un boliche de Orlando, visitó el lugar antes del ataque y utilizó una aplicación para conocer homosexuales, incluso afirman que era habitué de Pulse.
Otra de las que salió a hablar abiertamente a los medios fue su ex esposa, Sitora Yusify, que el domingo dijo bajo anonimato que Mateen le había pegado y que era homófobo.
Hoy, reveló al diario The New York Post que Mateen tenía «tendencias homosexuales» y que frecuentaba el club nocturno donde perpetró la peor matanza con armas de fuego de la historia moderna del país.
Según el periódico Orlando Sentinel, por lo menos cuatro clientes de Pulse aseguran haber visto «varias veces» al autor de los disparos en el local antes de que el domingo realizara la matanza que se cobró la vida de 49 personas y dejó heridas a otras 53, cinco de ellas en estado crítico.
«A veces él iba a un rincón y se sentaba y bebía solo, y otras veces se emborrachaba tanto que era ruidoso y beligerante», dijo Ty Smith que lo vio a Mateen «por lo menos una decena de veces» en el local.
«Realmente no hablábamos mucho con él, pero lo recuerdo diciendo cosas sobre su padre, a veces», agregó Smith, quien también manifestó que el autor de la matanza comentó que tenía una esposa y un hijo.
Kevin West, otro cliente de la discoteca, señaló que Mateen lo contactó por medio de la aplicación Jack’d, popular en la comunidad gay, desde un año antes del ataque y de manera regular, según recoge el periódico Los Angeles Times.
West agregó que una hora antes del ataque, cuando dejó a un amigo en el local, vio a Mateen en las inmediaciones de la discoteca vistiendo una gorra oscura y con un teléfono negro en la mano.
«Caminó justo a mi lado. Le dije ‘Hey’, él se volvió y dijo ‘Hey’ y me saludó con su cabeza», recordó West, quien luego confirmó la identidad de Omar Seddique Mateen ante una foto que le mostraron desde el FBI.
La ex esposa, que estuvo casada con Mateen en 2009 por tres meses, habló junto a su novio Marco Dias con la televisión brasileña SBT Brazil.
Sitora Yusify dijo que creía que Mateen tenía «tendencias homosexuales» y que su padre lo había llamado «gay» enfrente de ella. Su novio, que tradujo al portugués, agregó que «el FBI le pidió a la mujer que no contara esto a los medios de Estados Unidos», consignó el diario neoyorkino.
Estas declaraciones están siendo investigadas pero, hasta el momento, las autoridades no informaron que Mateen, abatido en un enfrentamiento con la policía el domingo por la mañana, haya visitado locales gays y sea usuario de la aplicación.
Desde el FBI, su director, James Comey, dijo que hay que desentrañar toda una serie de declaraciones del atacante que no encajan y no se descarta que haya actuado con algún cómplice o ayuda pese a que la virtual candidata presidencial estadounidense Hillary Clinton hablara de un «lobo solitario».
Comey también descartó que Mateen haya recibido órdenes de alguna red internacional extremista y dijo que se había radicalizado a través de Internet en base a diferentes fuentes, informó la agencia de noticias DPA y la cadena CNN.
El mismo presidente Barack Obama ratificó ayer en el Salón Oval que no había evidencia clara de que Mateen haya actuado bajo las órdenes del EI o en coordinación con este grupo, que opera en Siria e Irak.
Mientras tanto, los debates se abren con más profundidad. La ONU instó hoy a Estados Unidos a controlar mejor la venta de armas en su territorio.
«Es difícil encontrar un motivo racional que explique por qué la gente puede comprar allí armas con tanta facilidad», dijo el alto comisionado para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein en Ginebra.
«Los asesinos, que en muchos casos están claramente perturbados, tienen diferentes orígenes. No hay ninguna raza o religión que domine este tipo de actos, el problema son las armas», declaró hoy el portavoz de la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Rupert Colville.
«La propaganda irresponsable a favor de las armas afirma que hacen más segura una sociedad, cuando todos los indicios apuntan en la dirección contraria», denunció.
Con el estupor a cuestas y las investigaciones en curso, en el centro de Orlando se erigió un memorial espontáneo poblado por fotografías, mensajes, flores, banderas, globos y muñecos para recordar a las víctimas mortales, ya identificadas.
De las 53 personas que resultaron heridas, cinco están en estado grave y seis han sido dadas de alta, informó la agencia de noticias EFE.
Armado con un rifle semiautomático AR-15 y una pistola, Mateen, un estadounidense de 29 años y de familia musulmana, hijo de padres afganos, abrió fuego dentro del boliche Pulse en la madrugada del domingo, durante una fiesta dedicada a la música latina y en el mes del Orgullo Gay.
Comey, del FBI, dijo también hoy que Mateen fue vigilado durante diez meses por radicalismo y entrevistado en una investigación posterior, pero no se encontraron motivos para mantener las indagaciones o prohibirle la compra de armas.
Mateen fue investigado y vigilado entre mayo de 2013 y marzo de 2014 por el FBI después de hacer comentarios en su puesto de trabajo sobre vínculos con Al Qaeda y la milicia chiíta libanesa Hezbollah, grupos contrapuestos. Sin embargo, a principios de junio de este año, compró las armas legalmente.