Paro y movilización para las CTA pero sólo simbólicas y aun poco claras “protestas” de las CGT de Moyano, Caló y Barrionuevo

Los efectos de la histórica movilización de trabajadores del 29 de abril parecen diluirse cuando las CGT nada quieren saber de paros a Macri, contra los despidos y defensa del empleo; apenas si hablan de acciones simbólicas y sin siquiera fecha conocida. Las CTA, en cambio, se movilizarán el 3 de junio a Plaza de Mayo, cumpliendo con lo manifestado en aquel acto por 1 de Mayo.

Las dos CTA resolvieron movilizar el 2 de junio a Plaza de Mayo contra el veto de la ley antidespidos y el tarifazo en los servicios públicos. Buscarán sumar más gremios y organizaciones políticas y sociales.

Los titulares de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky y de la CTA Autónoma, Pablo Micheli, confirmaron que convocarán a una movilización unitaria el 2 de junio próximo a Plaza de Mayo como “una respuesta rápida al veto presidencial a ley antidespidos y el tarifazo” en los servicios públicos, informa el sitio Info Gremiales.

“Creemos que es necesaria una respuesta rápida y después habrá tiempo para seguir con la unidad en la acción (también con las CGT)”, adelantó Yasky, mientras que Micheli, dijo que la movilización será anunciada hoy en una conferencia de prensa conjunta de las dos CTA.

Los secretarios generales de la CTA de los Trabajadores analizaron ayer por la tarde los preparativos de la marcha unitaria del 2 de junio en la sede de la central, en Piedras 1065, mientras que la CTA Autónoma ya hizo lo propio la semana pasada en el edificio de Lima y México de la ciudad de Buenos Aires.

“Nos vamos a movilizar en forma conjunta con la CTA Autónoma y organizaciones sociales y sindicales fuera del espectro de las CTA que también se van a sumar”, expresó Yasky.

Mientras tanto buscarán tender puentes con organizaciones cegetistas combativas para tentarlas en participar de la movilización, ampliar la multisectorial y sumar fuerzas a la protesta.

La CGT Azopardo que lidera Hugo Moyano gambeteó el paro tras el veto y anunció, sin fecha, “una jornada de protesta” con ollas populares en varias plazas del país a causa de “la situación de pobreza y despidos”.

Como se esperaba, la CGT moyanista evitó ir a un paro y confrontar abiertamente con el Gobierno nacional. Por ello, y para matizar la resolución, definió por “unanimidad” una jornada de protesta con ollas populares, ya utilizada en varias ocasiones durante el menemismo.

La decisión se dio en una reunión convocada para analizar los pasos a seguir tras el veto del presidente Mauricio Macri a la ley que impulsaban las cinco centrales obreras para impedir nuevos despidos durante los próximos seis meses.

Tras esta reunión, Moyano y sus principales laderos se trasladaron al sindicato de UPCN, donde se realizó una reunión con el resto de los sectores de la CGT para continuar debatiendo el proceso de unidad y se avanzó con cuestiones referidas a la organización del Comité Confederal del próximo viernes 3 de junio, que será la instancia previa al Congreso en el que se elegirán a las próximas autoridades de la central unificada.

El líder de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, pegó el faltazo en este último encuentro (envió en su lugar a Carlos Acuña del sindicato de Estaciones de Servicio), al que asistieron Moyano, Antonio Caló (UOM), Héctor Daer (Sanidad), Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias) y Abel Frutos (Panaderos), entre otros.

Lo que aún quedaba por definir era si los demás sectores cegetistas se plegarán a la jornada de protestas con ollas populares, que aún no tiene fecha establecida, tal como realizó Moyano durante el menemismo en todas las plazas públicas de Capital Federal, Gran Buenos Aires y las principales ciudades del interior del país.

Lingeri, del grupo de los “independientes”, tomó distancia de esa protesta, pero Andrés Rodríguez, que integra el mismo sector cegetista, dijo en diálogo con NA que su gremio aportará “alimentos y todo lo que sea necesario para colaborar”.

En declaraciones a la prensa tras el encuentro en UPCN, Moyano volvió a descartar un paro contra la gestión de Macri, aunque ratificó la convocatoria a una jornada de movilización y advirtió que “hay gente a la que no le alcanza el sueldo”.

“Hay que definir la fecha y llevar ollas populares a las plazas para que la gente que tenga necesidades venga a comer”, enfatizó el camionero, mientras que Omar Plaini (Canillitas) amplió: “La pobreza se ha incrementado por los despidos”.

Pese a que la dos CTA presionan con ir a un paro nacional en breve, Moyano cargó contra los medios de prensa: “Vamos a ser nosotros los que vamos a definir un paro, no el periodismo. Los que más piden un paro ahora son los mismos que le chupaban las medias al gobierno anterior”, disparó.

En similar sentido se pronuncio su hijo Facundo Moyano (Peajes) tras participar de la reunión en Azopardo: “Ahora parece que están todos apurados para que la CGT haga un paro, vamos a definir una medida de fuerza cuando sea adecuado, las condiciones para eso las fijarán los trabajadores, no el periodismo, ni los opinólogos”.

Por su parte, Andrés Rodríguez afirmó a NA que no está en consideración un paro nacional aunque sostuvo que la CGT “seguirá realizando todas las acciones necesarias para defender el empleo y el poder adquisitivo”.

En la reunión en UPCN los distintos sectores cegetistas decidieron conformar una mesa de cuatro integrantes (Daer, Acuña, Frutos y Mario Caligari, de UTA) que se encargará de llevar adelante todas las cuestiones organizativas para el Comité Confederal que se hará en la sede de Azopardo y que servirá para convocar formalmente al Congreso cegetista, que el 22 de agosto en el Estadio Obras Sanitarias elegirá a la próxima conducción.