La telenovela coreana «Escalera al Cielo» arrancó liderando la tarde
Mientras los fanáticos del género «drama» coreano invadieron las redes sociales con comentarios sobre la poética historia de un amor más allá del tiempo, que se estrenó en 2003 en su país de origen y se convirtió en un éxito televisivo a escala planetaria en los últimos años, siguiendo una programada política de estímulo por parte del gobierno de su país.
El primer episodio de la telenovela surcoreana «Escalera al cielo» (Telefé) lideró la tarde de ayer con picos de 9.9 puntos de rating y se convirtió en uno de los cinco programas más vistos del miércoles.
Las intensas miradas entre los miembros de la pareja principal Song Joo y Jung Suh ya desde niños presagian un amor eterno sostenido en experiencias compartidas, ya que cada uno carga con la temprana y definitoria pérdida de uno de sus padres, más una sensibilidad especial hacia el lenguaje de la música, casi otro protagonista de la historia.
«La sinergia entre los discursos del cine, la música y el diseño logran que los dramas puedan contar historias destinadas a cualquier publico, ya que hablan un lenguaje masivo, globalizado. ‘Escalera…’ y ‘Sonata de invierno’ estallaron en Japón y China a principios de 2000, aunque Corea tiene una política fuerte de difusión de sus productos audiovisuales desde principios de los ’90» afirmó Gabriel Presello, encargado de gestión cultural en el Centro Cultural Coreano, en relación con estas series.
«El objetivo -continuó- consistía en que las producciones llegaran a la mayor cantidad de países, porque una vez que ingresan, la fórmula es un éxito como ocurrió en Asia, Europa o en Chile y Perú naciones latinoamericanas con gran influencia oriental.
Argentina tiene una producción fuerte en la materia y resultó más difícil ingresar, pero los dramas tienen un formato cómodo para ser exportado, con una duración de 24 capítulos como máximo, a diferencia de los extensos culebrones turcos».
Para muestra bastan algunas cifras: En 2014, la música generó 382 millones de dólares y la televisión 573 millones, según estadísticas del Korea Foundation for International Culture Exchange o (Kofice), dependiente del Ministerio de Cultura Deporte y Turismo de Corea, que interviene en las tareas de difusión de estos productos culturales en el exterior.
Ya desde la primera emisión de la tira, la dinámica narrativa y el contenido romántico consiguen que, «tomes partido por la parejita y entiendas que los malos tienen sus razones para actuar», señaló Jimena González, fundadora de Lollipop, una productora argentina especializada en eventos culturales originados en Corea.
«Ellos -destacó González- trabajan la producción de cada episodio que suele contar con sponsors de peso y son una muestra del programa gubernamental que difunde la oleada cultural coreana conocida como Hayllu».
El movimiento tiene la fuerza necesaria para unir música, especialmente el K-Pop cuyas estrellas suelen actuar en los dramas, el turismo, la gastronomía y los aspectos socioculturales básicos, junto a la difusión de ciertos valores como el respeto a los mayores.
«Escalera al cielo», como buen melodrama, tiene una villana mayor, la madrastra actriz que enamora al padre de la protagonista, secundada por dos malvados más jóvenes, sus hijos, especialmente la hermanastra cuya crueldad no tendrá fin a lo largo de los 20 episodios.
La suerte para esta tira donde a diferencia de los culebrones latinoamericanos la pasión parece traducirse a través de gestos, conductas de sacrificio por amor al otro y detalles de cuidado, más que por besos y escenas de carga sexual, ya está echada para los fans del género, muchos de los cuales siguen a diario los «dramas» ni bien se estrenan en Corea y son subtitulados.