Purmamarca se apresta a recibir a los turistas en la temporada de verano
Con el Cerro de Siete Colores como ineludible carta de presentación, el pueblo de Purmamarca, en la Quebrada de Humahuaca, región declarada Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad por la Unesco en 2003, lanzará la temporada de verano el próximo viernes en el atrio de la Iglesia local, donde se recibirá a los primeros turistas.
La actividad prevista para la apertura de la temporada denominada: Purmamarca en Colores, contará con el baile de niños adoradores y bandas de sikuris quienes al son de villancicos celebrarán el comienzo del itinerario cultural, jornada que se cerrará con la expresión de la música de raíz a través del canto de la reconocida artista jujeña Noelia Gareca.
En una conferencia de prensa realizada hoy en la capital jujeña, el flamante jefe comunal de Purmamarca, Marcelo Aramayo, junto a la directora de Turismo local, Josefina Calderón, convocó a la comunidad a participar del evento, el cual contará con la presencia del ministro de Turismo y Cultura de Jujuy, Carlos Oehler.
Sobre los desafíos que presenta el turismo en el lugar, Aramayo señaló a Télam que se busca “mejorar los servicios, por lo que se mejorará los lugares de estacionamiento de vehículos”, a la vez que anunció que en los próximos días se inaugurará la nueva terminal de ómnibus, para una “mayor organización y comodidad de la gente del pueblo y los turistas”.
Por otra parte el comisionado municipal valoró el itinerario cultural que presenta Purmamarca, el cual tiene como estandarte el tradicional Encuentro de Copleros, topamiento de miles de cantoras con caja, el cual tendrá lugar el próximo sábado desde las primeras desde de la mañana en el Club Santa Rosa.
El calendario de algarabía además tendrá como atractivo el Festival del Queso previsto para fines de enero, para luego el próximo 6 de febrero las comparsas del pueblo desenterraran el diablo de carnaval.
Purmamarca se ubica en el punto medio de la Quebrada de Humahuaca, a unos 65 kilómetros al norte de la capital jujeña, entre sus circuitos más recorridos se destaca el imponente cerro de siete colores.
El pueblo de orígenes prehispánico, también invita a desandar el Paseo de los Colorados, sendero de tres kilómetros por la quebrada de El Repaso, donde se podrá disfrutar de múltiples referencias geológicas de 600 millones de años.
Desde este lugar los visitantes podrán partir hacia la Cuesta del Lipán, tramo zigzagueante y empinado de la Ruta nacional 52, donde se alcanza una altitud de 4170 msnm, para luego llegar a Las Salinas Grandes, inmensidad blanca de la puna jujeña, y continuar la aventura por el Paso de Jama, en la frontera con Chile.