“Las familias deben dejar de gastar en cosas superficiales como la leche”
Según datos del propio Ministerio de Agroindustria, en 2016 cada argentino tomó cuatro litros menos de leche que un año antes, con una caída del 9,2%. La ingesta por persona se redujo así a 40,1 litros anuales, una proporción de menos de media taza por día, alcanzando el nivel más bajo de consumo desde 2003.
Indagada sobre ese panorama, la vicepresidenta Gabriela Michetti, dio insólitas respuestas, en diálogo con radio La Red. “Lo que yo llamo raíces para el crecimiento y el desarrollo, estoy hablando de un modelo también de crecimiento para las familias que tiene alguna diferencia con solo consumir los famosos bienes no durables”, planteó.
Sin hacer comentario alguno sobre los preocupantes índices en materia de consumo de leche, Michetti resaltó que en la gestión de Cambiemos apuntan a que “parte de ese consumo que se iba en cosas más superficiales o más pequeñas en términos de lo que significan para la vida pase a ser un consumo que tenga que ver con la inversión en una casa”.
“Creo que eso es calidad de vida, mucho más que comprarte tres camisas en vez de una o dos televisores porque te salen más fácil o más barato o porque podés tener muchas cuotas”, añadió la segunda de Mauricio Macri, colocando a la leche en la misma lista que las camisas y los televisores en materia de prioridades.