Mujer que denunció a su exmarido 40 veces por violencia de género pide que lo detengan
Una mujer que denunció 40 veces a su exesposo entre amenazas, lesiones y hasta una tentativa de femicidio, pidió en las últimas horas que sea detenido luego de que días atrás volvió a golpearla a ella y a su hijo tras incumplir una restricción de acercamiento, en el partido bonaerense de Vicente López.
«Estoy aterrada porque tengo a toda mi familia en peligro, estoy segura que me va a matar no tengo ni la menor duda, a mi hijo, a mi nuera, hasta amenazó a mi abogado Andrés Bonicalzi», dijo esta tarde al canal Todo Noticias.
El letrado, quien representa a la mujer, aseguró a Télam que el último episodio comenzó el 29 de septiembre, cuando «la justicia le ordenó a Zanocco una exclusión de hogar por tres meses y una restricción de acercamiento a la casa de 300 metros y de 100 metros respecto de ella, de su hijo llamado Nataniel y de la novia de él».
De acuerdo a la denuncia, «hace pocos días violó la perimetral agrediendo físicamente a Nataniel y luego ingresó al hogar e intentó matar a Úrsula».
«Al hijo lo agarró a trompadas en la calle y a ella le pegó en el ojo, en el labio, quedó con marcas en los brazos, se tuvo que encerrar para resguardarse», precisó Bonicalzi.
Los investigadores judiciales admitieron que la mujer ya realizó varias denuncias en contra de su exmarido y explicaron que en muchas de ellas la mujer desistió de seguir acusando a Zanocco y por eso continuó en libertad.
Para contextualizar la situación que sufre Huebner, quien tiene asistencia psicológica, el abogado Bonicalzi dijo que «dos días antes de que le pegue al hijo y a ella, había ido con el agresor al juzgado de familia a pedir que le levanten la perimetral para que pueda volver a la casa», situada en la calle Aristóbulo del Valle, de Florida.
«Es un círculo muy patológico y el hombre trató de matarla, acá tienen que ordenar la detención», pidió.
De hecho, la fiscal Osores Soler elevó a juicio oral una de las causas denunciadas por la mujer ante el Juzgado en lo Correccional 1 de San Isidro por «amenazas, desobediencia y lesiones», pero la mujer se presentó en varias oportunidades para dejar «sin efecto» la acción penal.
«El caso es muy particular porque sufre hay una violencia crónica, ella es una típica víctima de género en el sentido de que lo termina perdonando y permite que vuelva al hogar», dijo a esta agencia el abogado Bonicalzi.
La fiscal Osores Soler pidió en el marco de la causa que llegó a debate oral una pericia psiquiátrica en marzo de 2019 para determinar si la voluntad de Úrsula estaba libre o si estaba inmersa en la problemática por este hombre, aunque nunca concurrió a ser examinada.
Ese expediente comenzó en 2017 cuando la funcionaria judicial dispuso la detención de Zanocco y el 21 de septiembre solicitó la prisión preventiva en una audiencia pero la mujer solicitó que sea liberado.
«Con anterioridad hubo situaciones de violencia de género luego de las cuales las partes han recompuesto la relación, denominada en la temática particular fase de ‘luna de miel’ que es en la que aparentemente está todo bien y después se vuelve a lo que sucede hoy», indicó un vocero judicial.
Si bien el magistrado interviniente dictó la prisión preventiva y hasta hubo un juicio oral, por los pedidos de Úrsula, el juez lo absolvió.
«Esto lo que demuestra en los casos de violencia de género es que la pata judicial, que a veces no funciona, aún cuando funciona no alcance porque acá tiene que funcionar en conjunto con la parte asistencial y del acompañamiento para empoderarla y se coloque en posición de víctima y pueda declarar contra el imputado», analizó un vocero de la Justicia.
En tanto, el hombre también llegó a juicio oral por dispararle un escopetazo que le dio en una pierna y estuvo privado de su libertad, pero ella declaró que era una mentira y que quería volver a ser una familia, no se presentó en el juicio y lo absolvieron, según Bonicalzi, el cual insistió en que la víctima es «hiper vulnerada».
«Necesitamos que la justicia entienda que si no se detiene de manera urgente a este sujeto, vamos a estar frente a un femicidio nuevo», explicó Bonicalzi, quien también compartió a Télam una serie de mensajes de WhatsApp que Zanocco le envió a Nataniel, el hijo de la mujer, a quien crío desde los cinco años.
«Esta vez lo vamos a arreglar a lo macho, si te la bancás. Te portás bien conmigo y hacés lo que yo te digo, porque yo con vos me porté bien así que arreglá la situación y si no vamos a lo macho como hay que hacerla y no haciendo escritos, inventando denuncias, cobarde de mierda, cagón de mierda, encima no tenés huevos para decirle a tu vieja ‘qué estás haciendo loca, encima que nos presta la casa nos deja vivir'», dijo el hombre en uno de los mensajes de voz.