Caso Generación Zoe: la justicia correntina ratificó las condenas contra Cositorto y la cúpula

El Superior Tribunal de Justicia de Corrientes confirmó por unanimidad la pena de 12 años de prisión para Leonardo Cositorto. El fallo valida la existencia de una asociación ilícita que estafó a ahorristas de Goya mediante un esquema piramidal.

La situación judicial de los líderes de Generación Zoe ha quedado sellada en la provincia de Corrientes. El Superior Tribunal de Justicia (STJ) ratificó este miércoles las condenas para los principales responsables de la organización, consolidando un fallo histórico contra las estafas financieras en la región. Leonardo Cositorto, líder del esquema, deberá cumplir 12 años de prisión, mientras que sus colaboradores más cercanos, Maximiliano Batista, Miguel Ángel Echegaray y Lucas Camelino, recibieron penas de ocho años.

El máximo tribunal provincial rechazó por unanimidad todos los recursos presentados por las defensas, confirmando que la estructura montada bajo el nombre de Zoe Empowerment S.A. no era una empresa de inversiones legítima, sino una organización criminal diseñada para el despojo. Los jueces dispusieron además que los sentenciados permanezcan bajo prisión preventiva, citando la gravedad de los delitos y el evidente riesgo procesal existente.

La ingeniería del fraude en Goya

La investigación judicial dio por probado que los condenados captaron los ahorros de casi un centenar de personas en la ciudad de Goya mediante promesas de rendimientos irreales: un 7,5% mensual en dólares. El esquema utilizaba una fachada de educación financiera y supuestos «robots de inteligencia artificial» que garantizaban ganancias extraordinarias, ocultando lo que en realidad era un modelo piramidal clásico o Esquema Ponzi.

El perjuicio patrimonial verificado en la causa superó los u$s396.000. Según los ministros del STJ, las maniobras revistieron una «afectación inusitada y de gran escala», destacando que la organización utilizó ingeniería psicológica para engañar a sectores vulnerables, incluyendo adultos mayores y trabajadores que habían invertido sus indemnizaciones laborales.

Argumentos del tribunal

En su resolución, los magistrados señalaron que los planteos de la defensa no eran más que una «reedición de controversias ya resueltas», validando la solidez de las pruebas recolectadas durante el juicio. El fallo subraya que los imputados crearon una «falsa sensación de solvencia» a través de la exhibición de lujos y una agresiva estrategia de comunicación, convenciendo a las víctimas de la legitimidad de un negocio que no tenía sustento real.

Respecto a las absoluciones de los hermanos Javier y Nicolás Medina, que habían sido cuestionadas por la fiscalía y la querella, el STJ decidió mantenerlas. El tribunal consideró que no se pudo demostrar que estos dos integrantes tuvieran conocimiento del plan criminal o capacidad de decisión dentro de la cúpula, aplicando el principio de falta de dolo.

Un cierre institucional para las víctimas

Con la firma de los cinco ministros del Superior Tribunal, se agotan las instancias de revisión ordinaria en la jurisdicción de Corrientes. Este fallo representa un alivio para los damnificados del litoral, quienes vieron evaporarse sus ahorros en uno de los fraudes más mediáticos de la historia argentina reciente.

La sentencia no solo castiga a los culpables, sino que sienta un precedente sobre la responsabilidad penal en los esquemas de captación de ahorro no autorizados. Mientras tanto, Cositorto y su equipo aún enfrentan otros procesos judiciales en diversas provincias del país, como Córdoba y Buenos Aires, donde el modelo de Generación Zoe dejó miles de víctimas adicionales.