ACUMAR clausuró un establecimiento que volcó hidrocarburos al Riachuelo
El vuelco clandestino fue detectado por la Patrulla Ambiental de ACUMAR en Valentín Alsina. La Policía Ecológica acompañó el procedimiento. Además, se denunció al antiguo dueño del lugar por tirar barriles con brea sobre el Camino de Sirga.
En una recorrida de rutina por el Camino de Sirga de la Cuenca Matanza Riachuelo, un grupo de inspectores detectó un vuelco clandestino de hidrocarburos al río. Fue en Valentín Alsina, a dos cuadras del Puente, donde funcionaba la ex empresa UMBER.
Una notoria mancha sobre el río y fuerte olor a gasoil alertaron a los inspectores de ACUMAR, quienes iniciaron un operativo de constatación y posterior clausura de la empresa que actualmente trabaja en el predio. El establecimiento hoy es administrado por un grupo de trabajadores que están impulsando consolidarse como una SRL y –según dijeron- desarrolla otras tareas productivas. (En el momento de la inspección se autodenominaron como cooperativa pero luego se corroboró que avanzaban a una SRL).
La colocación de fajas y precintos no pudo desarrollarse con normalidad por lo cual se aplicó una sanción por obstrucción al procedimiento, se inició una causa penal y pidió el proceso de allanamiento a la Gendarmería Nacional.
En la inspección, el equipo de ACUMAR junto a la Policía Ecológica de la Provincia de Buenos Aires pudo detectar que al vaciarse los tanques que pertenecían al anterior dueño, se estaban utilizando los caños pluviales para la descarga, razón por lo cual, todo el desecho de hidrocarburos estaba cayendo en el río.
ACUMAR labró un acta de inspección, clausuró el establecimiento e intimó al dueño del predio a remediar el daño ambiental y disponer los mecanismos necesarios para que el proceso productivo que hoy enfrentan no dañe el ambiente.
Durante este operativo, también se verificó sobre el Camino de Sirga, tambores plásticos y metálicos de 200 litros llenos de una sustancia asimilable a brea e hidrocarburo. Estos tambores, unos 10, estaban volcados sobre la calle y el material corría hacia un desagüe pluvial. El cuerpo de inspectores vinculó los tambores con un predio lindante al primero inspeccionado, donde identificó más tambores y pudo ver el suelo impactado con hidrocarburos. El predio estaba siendo alquilado y acondicionado para la venta por menor de pollos. Se clausuró e íntimo a su remediación y al retiro del material en la vía pública.