Crisis textil: cerró una planta en Lanús y 50 trabajadores quedaron cesantes

El cierre de la textil Hazan Silvia en Lanús desató una nueva crisis laboral que dejó 50 trabajadores cesantes. La crisis textil se agrava por la apertura de importaciones y la caída productiva, mientras el gremio acusa a la firma de intentar pagar indemnizaciones reducidas.

La puerta que se cierra: el caso Hazan Silvia y el fantasma de las importaciones

Una nueva señal de alarma se encendió en el corazón productivo del sur del Gran Buenos Aires. La empresa textil Hazan Silvia, ubicada en Lanús, anunció el cierre definitivo de su planta, dejando a 50 operarios en la calle (40 afiliados a la Asociación Obrera Textil, AOT, y 10 fuera de convenio). El dueño atribuye la decisión a la profunda crisis económica que atraviesa la industria y a la imposibilidad de competir con los productos importados, particularmente los provenientes de China.

Sin embargo, el anuncio desató la furia sindical y una protesta conjunta que involucró a la CGT Lanús-Avellaneda, ambas CTA y las 62 Organizaciones Peronistas locales. La movilización derivó en una conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo bonaerense, frenando momentáneamente los despidos e impulsando una nueva audiencia de negociación.

La acusación sindical: el dueño «no aprovechó las oportunidades»

El secretario general de la AOT, Guillermo Aguilar, fue contundente en su crítica al propietario de la firma. Si bien admitió que el sector no puede «competir con los chinos» debido a la apertura indiscriminada de importaciones, desestimó el argumento de la quiebra inminente de la textil, acusando al empresario de buscar ganancias rápidas a costa de los trabajadores.

Aguilar enumeró diversas ayudas que la empresa habría recibido, incluyendo asistencia del programa PREBA de la Provincia, exención de cargas sociales y un crédito del Banco Provincia, señalando que el dueño «no aprovechó las oportunidades que se le dieron». La acusación más dura es que el empresario habría «ganado plata» durante 25 años para ahora, en un contexto de crisis, «dejar a todos los trabajadores en la calle».

La batalla por las indemnizaciones: artículo 247

El conflicto laboral se centra ahora en el tipo de indemnización que recibirán los empleados. El dirigente gremial denunció que el propietario busca liquidar las cesantías apelando al artículo 247 de la Ley de Contrato de Trabajo. Este artículo permite el pago de una indemnización reducida (equivalente a la mitad del resarcimiento completo del artículo 245) en casos de fuerza mayor o falta o disminución de trabajo no imputable al empleador.

«Lo hacen para que cada trabajador termine arreglando migajas porque no puede esperar un juicio», analizó Aguilar, mostrando la preocupación por la vulnerabilidad de los operarios ante un proceso judicial prolongado. La AOT apuesta ahora a la mediación del Servicio de Conciliación Laboral Obligatorio (SECLO) para lograr que se reconozca el pago completo o una compensación justa para los 50 afectados.

El desmoronamiento de la industria textil

El caso de Hazan Silvia es un reflejo de la profunda recesión que golpea al sector a nivel nacional. La industria textil argentina atraviesa un momento crítico, con indicadores que duplican o cuadruplican la contracción del promedio industrial del país.

Cifras de la crisis: producción, empleo e importaciones

Los datos de la contracción son alarmantes:

  • Caída Productiva: Para agosto de 2025, la producción textil se desplomó un 18,1% interanual. Este retroceso es significativamente mayor a la caída promedio industrial del 4,4%.

  • Capacidad Instalada: La utilización de la capacidad instalada se ubica en un crítico 41,5%, dejando más de la mitad de las instalaciones productivas sin uso.

  • Pérdida de Empleo: El sector registró la pérdida de 5.000 empleos formales en el último año, quedando la dotación en 108.000 trabajadores.

  • Comercio Exterior: Mientras las exportaciones textiles se redujeron un 12% en el último año, las importaciones se dispararon un 119%. Este desequilibrio es la causa central de la incapacidad de la industria local para competir.

La situación del empleo se agrava con el panorama general, ya que el Indicador de Confianza Empresarial (ICE) del INDEC revela que casi ninguna empresa, solo un 3,4%, planea contratar personal a corto plazo, describiendo un mercado laboral prácticamente paralizado para los cesantes de Lanús.

Materia prima en crisis

Las dificultades no solo vienen por el lado del mercado y las importaciones. El abastecimiento de materia prima también presenta problemas estructurales. La producción de algodón cayó cerca de un 15%, y los precios al productor han crecido apenas un 10% anual, muy por debajo de la inflación general. Este escenario de bajos precios de materia prima y desplome de la producción final profundiza la crisis de rentabilidad.