Quién es Pablo Laurta, el uruguayo detenido por el doble femicidio de Córdoba
Pablo Laurta, el uruguayo de 45 años detenido en Gualeguaychú por el doble femicidio de su expareja, Luna Giardina, y la abuela de ella, Mariel Zamudio, era el líder de “Varones Unidos”, un movimiento que militaba activamente contra las “falsas denuncias” por violencia de género. La Justicia lo apunta como el principal sospechoso tras ser capturado junto al hijo de ambos.

La detención de Pablo Laurta en Gualeguaychú, Entre Ríos, cuando intentaba cruzar la frontera hacia su país natal, Uruguay, puso fin a una intensa búsqueda tras el doble femicidio ocurrido el sábado en Villa Serrana, Córdoba. Laurta, señalado por la Justicia como el presunto autor de los asesinatos de su expareja Luna Giardina (madre del niño secuestrado) y de la abuela materna, Mariel Zamudio, no es una figura anónima. El hombre de 45 años, con formación en periodismo y gerencia, era el activo presidente de la agrupación «Varones Unidos», un movimiento que tenía como principal bandera la denuncia de supuestas «falsas acusaciones» de violencia de género, un discurso que contrasta drásticamente con la denuncia que pesaba en su contra.
La militancia antifeminista en el centro del caso
La faceta pública más notable de Pablo Laurta, oriundo del barrio Buceo en Montevideo, era su liderazgo en «Varones Unidos». Este movimiento se describía en su sitio web como un espacio para incorporar la “perspectiva masculina a las discusiones de género”, buscando visibilizar problemáticas que, a su criterio, afectaban mayormente a los hombres, como el “fraude parental” y la “discriminación judicial”.
Irónicamente, la plataforma de militancia de Laurta estaba intrínsecamente ligada a su disputa personal. En la cuenta de X del movimiento, el posteo fijado era un artículo titulado: “El Caso Pedro Laurta: cómo la justicia feminista de Córdoba mantiene a un niño secuestrado en Argentina en un contexto de extorsiones y explotación infantil”. En ese blog, el presunto femicida relataba su versión de la disputa por la tenencia de su hijo, en un combo de supuestas extorsiones, hostigamiento y estafas en contra de su expareja.
La defensa de las «denuncias falsas»
La postura ideológica de Pablo Laurta se hacía evidente en cada aparición pública y en sus redes sociales, donde se mostraba a favor de figuras políticas como Javier Milei y Donald Trump, y se posicionaba vehementemente en contra del feminismo.
En una entrevista televisiva años atrás, mientras se debatía la ley de violencia de género en el parlamento uruguayo, Laurta argumentaba que la normativa “establece una asimetría” y vulneraba el principio de igualdad al definir dos leyes distintas para el mismo delito. En ese entonces, ejemplificó su temor a la normativa aludiendo a la posibilidad de que una pareja, al querer separarse, pudiera presentar una denuncia, “que puede ser cierta o no”, para lograr la expulsión del hombre del hogar. Su defensa de la tesis de las «denuncias falsas» incluía publicaciones a favor del actor Johnny Depp en su disputa legal contra Amber Heard. Incluso, en 2016, impulsó la visita a Uruguay de los autores Agustín Laje y Nicolás Márquez.
De empresario ha acusado de doble femicidio
Además de su militancia, Pablo Laurta tenía un perfil profesional en el área de marketing online y contenidos, con una empresa fundada en 2010 en Uruguay. Si bien había estudiado periodismo y gerencia, su rol como presidente de “Varones Unidos” lo catapultó a la esfera pública.
Este perfil, sin embargo, contrasta con el contenido de la denuncia por violencia de género que había realizado Luna Giardina en su contra. En su presentación ante la Justicia, la joven de 24 años detalló un patrón de manipulación y coerción. “Desde que comenzamos la relación, me manipula y me obliga a hacer cosas que yo no quiero, como tener relaciones sexuales cuando yo no quería, a ir a Uruguay cuando yo no quería, no me dejaba tener redes sociales, no me dejaba tener celular y no me dejaba trabajar”, indicó la víctima.
Lo más grave de la denuncia, que Laurta tachó de falsa en sus posts, era la acusación de que el hombre había intentado ahorcarla, un episodio que motivó a Luna a regresar a Córdoba con su hijo para buscar protección, un acto que, lamentablemente, no pudo evitar el trágico desenlace.
La captura de Pablo Laurta y su hijo, sano y salvo, marca el inicio de la investigación judicial del doble femicidio en Córdoba. El perfil del acusado, un militante activo y vocero de la lucha contra las «denuncias falsas», agrega un dramático y complejo matiz al caso, que ahora se centrará en desentrañar las graves acusaciones de violencia y coerción que existían en su contra y que, finalmente, habrían desembocado en la tragedia.