La venta de combustibles cae 3% en agosto y alerta sobre la sostenibilidad del sector

La venta de combustibles al público en Argentina registró una caída del 3% en agosto respecto al mes anterior, reflejando el impacto del costo de vida en el consumo de las familias.

El costo de mantener un vehículo en Argentina se ha convertido en un desafío cada vez mayor para las familias, una realidad que se traduce directamente en la retracción del consumo. En agosto, las ventas de combustibles cayeron un 3% en comparación con julio, según datos de la Secretaría de Energía analizados por la consultora Politikón Chaco. Esta baja mensual se produce en un contexto de estancamiento general de la demanda, ya que la comparación interanual (contra agosto de 2024) apenas arroja una suba marginal del 0,4%.

Radiografía de la demanda: caídas en 16 jurisdicciones

El informe detalla que las estaciones de servicio despacharon un total de 1.420.350 metros cúbicos de combustibles. Al analizar la comparación interanual, el panorama es de fuerte disparidad: se registraron caídas de las ventas en 16 jurisdicciones del país, mientras que solo ocho experimentaron aumentos en el consumo.

Las tres provincias con el mejor desempeño interanual en agosto fueron:

  • Santiago del Estero: Suba del 10,6%.
  • Buenos Aires: Aumento del 7%.
  • San Juan: Crecimiento del 6,8% en las ventas.

En el extremo opuesto, las jurisdicciones con los peores resultados en la comparación interanual fueron:

  • CABA: Caída del 11,7%.
  • Misiones: Descenso del 10,6%.
  • Santa Cruz: Baja del 6,5%.

Disparidad por tipo de combustible y liderazgo de YPF

Al segmentar la demanda por tipo de producto, se observaron tendencias divergentes. La venta de naftas experimentó un aumento del 3% en la comparación interanual, impulsada principalmente por el consumo particular. En contraste, los despachos de gasoil descendieron un 2,7% en el mismo período, un dato que puede reflejar una menor actividad productiva y de transporte de carga.

Dentro del segmento gasoil, la disparidad es aún mayor: el gasoil premium aumentó un 10%, mientras que el gasoil común sufrió un desplome del 9%. Este fenómeno podría estar ligado a la búsqueda de ahorro por parte de los consumidores o a cambios en el mix de vehículos y flotas que utilizan el combustible de mayor calidad.

En cuanto a la participación de mercado, YPF se mantiene como líder indiscutido con el 55,1% del total despachado, logrando además un crecimiento del 4,9% interanual. Su principal competidor, Shell, controló un 22,6% del mercado, aunque registró una caída del 7,6% en sus ventas.

La advertencia del sector pyme: crisis de rentabilidad

El derrumbe en las ventas y el estancamiento de la demanda han generado una profunda preocupación en el sector comercializador. Los dueños de estaciones de servicio pyme, nucleados en el espacio Expendedores Unidos, emitieron un comunicado el 9 de septiembre para alertar sobre la grave situación.

En el texto, los empresarios expresaron que «la totalidad de las estaciones de servicio bajo bandera se enfrenta a una severa crisis de rentabilidad«, una situación impulsada por el fuerte aumento en los costos operativos, administrativos, sindicales e impositivos.

El principal factor de alarma es que este incremento de costos no se compensa con la actividad comercial. La «falta de recuperación en los niveles de venta» es, para el sector, el elemento que «pone en alerta la sostenibilidad de las unidades de negocio«. La caída del consumo en agosto profundiza esta crisis y exige una pronta respuesta económica para evitar un deterioro estructural del sector minorista de combustibles.