Escándalo en la Justicia: Condenan a exfiscal por espiar el teléfono de su exnovia
Un exfiscal de Rosario, Fernando Rodrigo, fue condenado a tres años de prisión condicional e inhabilitación perpetua para cargos públicos por haber utilizado recursos del Estado para espiar ilegalmente el teléfono de su ex pareja y allegados. El funcionario judicial había camuflado estas escuchas dentro de una investigación falsa sobre robo de autos, un caso que ha conmocionado al ámbito judicial.

Fernando Rodrigo, quien se desempeñaba en una de las unidades de Investigación y Juicio del Ministerio Público de la Acusación de Rosario, aceptó este lunes la condena por delitos de peculado (malversación de caudales públicos), falsedad ideológica y abuso de autoridad, agravados por su condición de funcionario público. Además de la pena de prisión condicional, la sentencia incluye la inhabilitación perpetua para ejercer cualquier cargo público y la imposición de reglas de conducta.
El esquema de espionaje y su descubrimiento
La maniobra del exfiscal, calificada de «insólita» por la gravedad de la situación, consistió en la creación de una causa judicial ficticia. Rodrigo elaboró una lista de números telefónicos supuestamente vinculados a una banda dedicada al robo de vehículos. Sin embargo, entre estos números, incluyó el de su ex pareja, el de familiares de ella e incluso el de empleadas de la propia Fiscalía.
Durante casi un año, entre agosto de 2016 y julio de 2017, Rodrigo accedió de forma ilegal a las comunicaciones privadas de su ex pareja y otras personas, todo bajo el manto de una investigación que nunca fue real. La fiscal Natalia Benvenuto, a cargo de la investigación, reveló en el juicio que el exfiscal llegó a acumular 183 CD’s con grabaciones obtenidas de manera ilícita.
El engaño se desmoronó cuando una empleada judicial descubrió que el teléfono de una compañera figuraba en la lista de escuchas, a pesar de no tener ninguna conexión con la supuesta banda delictiva. Esta revelación desencadenó la investigación que culminó con la condena de Rodrigo.
Consecuencias y antecedentes polémicos
Cuando el escándalo salió a la luz pública, Fernando Rodrigo presentó su renuncia al cargo, la cual fue aceptada por el entonces gobernador Miguel Lifschitz. Formalmente imputado en agosto de 2019, este caso sentó un precedente alarmante sobre el uso indebido del poder.
Lo más polémico del historial de Rodrigo es que, a pesar de estos antecedentes y la investigación en curso, en junio de 2022 su nombre apareció en una terna de candidatos para ocupar la Fiscalía Federal de Río Gallegos, lo que generó una fuerte controversia en el ámbito judicial y político.
Con la condena ya aceptada, Fernando Rodrigo queda definitivamente fuera del ejercicio de la función pública, cerrando un capítulo oscuro en su carrera judicial, marcada por una maniobra que instrumentalizó los recursos del sistema de justicia para satisfacer un interés personal.