La Iglesia advierte al Gobierno: La ausencia del Estado facilita el avance del narcotráfico
La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) ha emitido una seria advertencia al Gobierno Nacional, señalando que el repliegue del Estado en los barrios vulnerables está generando un vacío que el narcotráfico ocupa rápidamente, estableciendo una suerte de "Estado paralelo". Según la Iglesia, esta situación está "condenando a la muerte a muchos" jóvenes argentinos.
En un contundente comunicado titulado “Si el Estado se corre, entra el narcotráfico”, la cúpula eclesiástica expresó su profunda preocupación por cómo las redes de droga seducen a la juventud con una «vida corta pero aparentemente mejor», a cambio de su dignidad, libertad y, a menudo, su propia vida. Este pronunciamiento es un llamado urgente a las autoridades para que refuercen la presencia estatal y el apoyo a las organizaciones que luchan en primera línea contra este flagelo.
Un vacío peligroso que exige presencia estatal
La Iglesia Católica enfatizó que la ausencia del Estado deja a los jóvenes más expuestos al consumo y al microtráfico. Para la CEA, desfinanciar o relegar las obras de acompañamiento y recuperación para adictos a la buena voluntad de voluntarios, es una forma indirecta de «condenar a muchos a la muerte».
El documento, difundido en el marco de la próxima Jornada Mundial de la ONU contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas (26 de junio), recalcó que la droga «mata por dentro, apaga la esperanza y corta proyectos» de innumerables chicos y chicas. Esta realidad, según los obispos, «duele e interpela» y «¡no podemos naturalizarla!».
El compromiso de la Iglesia y la clave del financiamiento
La Conferencia Episcopal Argentina reafirmó su compromiso activo en la lucha contra el narcotráfico, destacando la invaluable labor de las comunidades eclesiales presentes en los barrios más empobrecidos. Parroquias, capillas, Hogares de Cristo y otras organizaciones trabajan de manera incansable para acompañar a quienes buscan salir de la adicción.
No obstante, los obispos fueron claros: esta ardua tarea no puede sostenerse sin un compromiso económico y una presencia constante del Estado. La recuperación, señalaron, no es un camino solitario, sino que se construye en red, con apoyo fraterno. «Sin el compromiso económico del Estado, esta ardua tarea no se sostiene. Y si esta tarea cae, no habrá quien reciba a los que tocan fondo buscando una segunda oportunidad”, advirtieron.
El comunicado concluyó con un pedido directo a los funcionarios gubernamentales: “¡Escuchen el clamor de los que luchan por salir del consumo! ¡Vean el dolor de familias y comunidades que están destrozadas por este flagelo!”. La Iglesia instó a la acción coordinada y urgente para evitar que el narcotráfico siga consolidándose en los espacios que el Estado abandona.
