María Cash: La Justicia organiza operativos clave en la ruta del camionero imputado por el crimen.

A más de 13 años de la desaparición de María Cash, la joven diseñadora que dejó un vacío inexplicable en su familia y en la sociedad argentina, la investigación parece encaminarse hacia una nueva etapa.

Bajo la dirección del fiscal federal Eduardo Villalba, los esfuerzos actuales se centran en determinar el paradero de su cuerpo, presuntamente asesinado por Héctor Romero, un camionero que habría recogido a Cash mientras hacía dedo cerca de General Güemes, en la ruta 9/34.

La ruta de los operativos

El plan de búsqueda se dividirá en dos fases. En la primera, Héctor Romero será trasladado a los lugares que mencionó en sus declaraciones, donde afirmó haber dejado a María en tres ubicaciones distintas: antes del santuario de la Difunta Correa, en el santuario mismo y, finalmente, en una gomería ubicada más adelante en la ruta. Estas contradicciones en sus testimonios se han convertido en elementos clave para situarlo como principal sospechoso del homicidio.

La segunda etapa contempla un análisis exhaustivo de las zonas que la investigación considera relevantes, especialmente en la ruta nacional 16, entre la localidad de Joaquín V. González y el tramo de 30 kilómetros que abarca El Boquerón, El Tunal y Ceibalito. Se priorizará esta región debido a que, según registros, Romero estuvo detenido allí durante más de una hora poco después de la desaparición.

El perfil del imputado

Las pericias psicológicas realizadas a Romero ofrecen un perfil inquietante. Natalia Colombo, psicóloga del Cuerpo de Investigaciones Fiscales, señaló elementos que refuerzan la hipótesis de culpabilidad: su enfoque en detalles específicos de la víctima, como su vestimenta de la cintura para abajo, y su recuerdo de olores pero no de otros aspectos físicos. Este comportamiento, argumenta Colombo, podría ser un indicativo de cosificación de la víctima, una característica recurrente en ciertos perfiles delictivos.

Además, las investigaciones detectaron contradicciones constantes en sus declaraciones y un lenguaje despectivo hacia María, lo que subraya el trato inhumano que habría recibido. Las comunicaciones y gestos de Romero también son analizados como piezas fundamentales del caso.

Obstáculos y esperanza

Aunque los avances generan expectativas, los investigadores se muestran cautelosos. Las condiciones climáticas, la actividad agrícola en las zonas marcadas y el tiempo transcurrido pueden haber alterado o destruido evidencias clave. Aun así, el fiscal Villalba expresó que los próximos días podrían ser decisivos para el caso.

Conclusión

La desaparición de María Cash sigue siendo uno de los casos más dolorosos y mediáticos en Argentina. El inicio de estos operativos renueva la esperanza de encontrar respuestas definitivas y hacer justicia para la joven y su familia. Sin embargo, los desafíos logísticos y temporales recuerdan la urgencia de esclarecer este caso, no solo como un acto de justicia, sino como un símbolo de la necesidad de fortalecer los mecanismos de búsqueda y resolución de desapariciones en el país.