Argentina fue el único país de la ONU en votar contra los derechos de los pueblos indígenas

Argentina sorprendió al ser el único país en la ONU en votar en contra de una resolución sobre derechos indígenas, impulsada por varios países latinoamericanos.

La Asamblea General de la ONU discutió una resolución sobre los derechos de los pueblos indígenas, un documento propuesto por Bolivia, Dominica, Ecuador, Liberia, México, Paraguay y Venezuela. Sin embargo, Argentina, bajo la gestión de Gerardo Werthein en Relaciones Exteriores, fue el único país en votar en contra de esta medida.

La resolución, que se deliberó el 22 de octubre de 2024 en la ONU, refuerza el compromiso internacional de proteger los derechos de las comunidades indígenas. Entre sus puntos clave, el documento insta a garantizar el consentimiento libre, previo e informado de estas comunidades en temas que afecten sus tierras y recursos. También destaca la necesidad de preservar sus culturas y lenguas, proponiendo que los pueblos indígenas participen plenamente en decisiones que impacten su bienestar y territorios.

El texto también enfatiza la importancia de revitalizar las lenguas indígenas, considerando su preservación como crucial para la identidad cultural de estos pueblos. La ONU subrayó la necesidad de desarrollar planes que valoren sus conocimientos ancestrales y fortalezcan su participación en la sociedad.

La decisión de Argentina de votar en contra ha generado reacciones diversas. Si bien el gobierno no ha emitido una declaración detallada que explique las razones del voto, especialistas en derechos humanos consideran que la postura podría responder a intereses internos relacionados con territorios o conflictos económicos que involucran a comunidades indígenas. Este voto aislado contrasta con el respaldo de otros países latinoamericanos, quienes ratificaron su apoyo a las poblaciones indígenas y sus derechos.

La decisión de Argentina ha despertado críticas y cuestionamientos sobre su compromiso con los derechos indígenas. La falta de apoyo al documento representa un mensaje contrario al de la mayoría de los países de la región y el mundo.