Creatividad y bienestar: el poder de las manualidades para la salud mental

Un estudio reciente sugiere que las manualidades, como pintar o trabajar la madera, podrían ser una herramienta clave para mejorar el bienestar emocional y superar la rutina diaria.

En un mundo donde la rutina y el estrés cotidiano pueden afectar la salud mental, las actividades creativas están emergiendo como una solución accesible y efectiva. Un estudio dirigido por la Dra. Helen Keyes, de la Universidad Anglia Ruskin en el Reino Unido, ha revelado que involucrarse en manualidades no solo es un pasatiempo agradable, sino que también puede ser más beneficioso para el bienestar emocional que el propio trabajo. Publicado en la revista Frontiers in Public Health, este estudio plantea que la artesanía ofrece una forma significativa de autoexpresión y satisfacción personal, aspectos que muchos empleos no logran proporcionar.

La investigación analizó datos de la encuesta anual Taking Part, realizada por el Departamento de Cultura, Medios de Comunicación y Deporte del Reino Unido, con la participación de casi 7.200 personas. Los resultados mostraron que el 37,4% de los encuestados participó en alguna actividad artística o artesanal en el último mes, y aquellos que lo hicieron reportaron niveles más altos de felicidad y satisfacción con la vida. La Dra. Keyes explicó que estos efectos positivos en el bienestar se mantenían incluso al considerar factores como la situación laboral y el nivel de privación. Según ella, «la artesanía no solo nos da una sensación de logro, sino que también es una ruta significativa hacia la autoexpresión.»

Este hallazgo subraya la importancia de fomentar la creatividad, sugiriendo que puede tener un impacto más profundo en el bienestar general que otros aspectos cotidianos, como el empleo. Además, aunque estas actividades son mayormente solitarias, no parecieron afectar los niveles de soledad de los participantes, lo que indica que su valor reside en la conexión emocional que establecen con la creatividad misma, más que en la interacción social.

La investigación también destaca la relevancia de integrar las manualidades en las políticas de promoción de la salud mental. La Dra. Keyes sugiere que los gobiernos y los servicios de salud deberían considerar financiar o incluso prescribir estas actividades como parte de sus estrategias para mejorar el bienestar de las personas, especialmente en poblaciones en riesgo. En su experiencia personal, Keyes ha encontrado satisfacción en proyectos de bricolaje, como la pintura y la decoración, afirmando que «hay algo inmensamente satisfactorio en ver los resultados de tu trabajo aparecer ante tus ojos.»

El estudio de la Dra. Keyes aporta una visión renovada sobre la importancia de la creatividad en nuestras vidas. Al descubrir que las manualidades pueden ser una poderosa herramienta para el bienestar emocional, se abre una puerta para que estas actividades sean reconocidas no solo como pasatiempos, sino como un componente esencial en la búsqueda de una vida más plena y equilibrada. Fomentar la creatividad podría, por tanto, convertirse en una clave para enfrentar los desafíos emocionales de la vida moderna.