El mercado no cree en la economía de Caputo y el FMI presiona por un nuevo ajuste
Los bonos soberanos y las acciones de firmas argentinas que cotizan en Wall Street viven una nueva jornada negativa, frente a dudas por el plan económico hasta el momento.
Malas noticias para las empresas argentinas que cotizan en Wall Street. Una ola vendedora volvió a golpear a las acciones, exacerbada por las crecientes dudas sobre el programa económico del gobierno de Javier Milei, ejecutado por su ministro de Economía, Luis Caputo. A estas preocupaciones se suman las presiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para eliminar el cepo cambiario, una medida que, dadas las reservas negativas del Banco Central (estimadas en 4000 millones de dólares), podría desencadenar una nueva y abrupta devaluación, con el consiguiente impacto inflacionario.
El impacto en las acciones y bonos argentinos
Las acciones de las empresas energéticas argentinas fueron particularmente afectadas en el mercado neoyorquino, registrando caídas de hasta casi el 4 por ciento. Este fenómeno no fue exclusivo del sector energético, ya que firmas de servicios, bancos y constructoras también experimentaron pérdidas significativas. Entre estas, se destacan YPF (-3,3 por ciento), Grupo Financiero Galicia (-1,3 por ciento), Telecom (-4,1 por ciento), Banco Macro (-2,9 por ciento), Central Puerto (-3,1 por ciento), Transportadora Gas (-3,8 por ciento) y Edenor (-2,2 por ciento).
El nerviosismo del mercado también se refleja en los bonos argentinos que cotizan en dólares en el exterior, aunque sus caídas fueron más moderadas, no superando el 1 por ciento. No obstante, el riesgo país argentino, medido por el JP Morgan, subió nuevamente por encima de los 1400 puntos, marcando 1.414 unidades por encima de los títulos del Tesoro estadounidense.
Factores subyacentes y perspectivas
Las dudas sobre el plan económico de Caputo no solo están vinculadas a la gestión actual, sino también a las incertidumbres legislativas. La Ley de Bases, que pronto regresará a Diputados, genera inquietud, especialmente en lo referente al Régimen de Incentivo de Grandes Inversiones (RIGI) y la reforma laboral. La claridad sobre estos aspectos será crucial para restablecer la confianza de los inversores.
Un operador de una importante firma de inversión señaló la alta volatilidad de los ADRs (American Depositary Receipts), afirmando: “Lo que veo en ADRs es mucha volatilidad. Un día vuelan y al otro caen. Ahí no hay mucho vínculo con las novedades de corto plazo. Sí con los bonos. Tendencialmente están en máximos desde 2018”.
La presión del FMI y el cepo cambiario
El FMI ha sido claro en su posición: la eliminación del cepo cambiario es una condición esencial para avanzar en los acuerdos con Argentina. Sin embargo, esta medida conlleva riesgos significativos en el corto plazo, principalmente debido al bajo nivel de reservas del Banco Central. La devaluación resultante podría desestabilizar aún más la economía argentina, generando un espiral inflacionario que afectaría tanto a empresas como a consumidores.
El ajuste propuesto por el FMI no solo implica la eliminación del cepo, sino también una serie de medidas fiscales y monetarias que buscan estabilizar la economía. Sin embargo, la implementación de estas medidas en un contexto de crisis puede ser socialmente dolorosa.