Longvie suspende al 50% de sus empleados en dos de sus plantas por caída de ventas
La empresa de electrodomésticos Longvie anuncia suspensiones en sus plantas de Catamarca y Entre Ríos debido al desplome de la actividad económica en el país. La medida afecta a cientos de trabajadores.
El impacto de la crisis económica se hace sentir con fuerza en la industria local. Longvie, reconocida empresa de electrodomésticos, se suma a la lista de compañías afectadas por la caída en las ventas, suspendiendo al 50% de sus empleados en las plantas de Catamarca y Entre Ríos.
La decisión de suspender a la mitad de los trabajadores en las plantas de Catamarca y Entre Ríos responde a la drástica disminución en las ventas experimentada en los primeros meses del gobierno de Javier Milei. El desplome de la actividad económica, exacerbado por la devaluación del 118% en diciembre y la consiguiente inflación que superó el 70% en tres meses, ha golpeado duramente al consumo interno.
Nicolás Álvarez, delegado de los empleados, expresó su preocupación ante la incertidumbre laboral: «Desde la gerencia nos dijeron que no había venta, que había bajado mucho la demanda. Realmente no tienen un panorama muy claro a futuro. Esto es día a día».
Las suspensiones, que comenzaron a regir este martes y se extenderán hasta mediados de abril, implican que los trabajadores afectados recibirán alrededor del 80% de sus salarios y estarán exentos de asistir a las plantas durante ese tiempo. En Catamarca, donde se produce la línea de lavarropas, y en Entre Ríos, donde se fabrican termotanques, calefones y estufas, el impacto es significativo, ya que se ven afectados 120 y 90 empleados respectivamente.
El panorama económico general para las pymes también es desalentador. Las medidas implementadas por el gobierno nacional para frenar la inflación han llevado a un desplome en las ventas minoristas, con una caída del 28,5% en enero y del 25,5% en febrero, según datos de CAME.
El escenario económico adverso continúa golpeando a las empresas argentinas, y Longvie no es la excepción. La suspensión del 50% de sus empleados en las plantas de Catamarca y Entre Ríos refleja los desafíos que enfrenta el sector industrial frente a la caída en las ventas y la incertidumbre sobre el futuro económico del país.