Alimentación infantil: La leche aumentó un 70% en 2024 y llega a los $1.200 el litro
El vertiginoso aumento del 70% en el precio de la leche durante 2024, que ahora alcanza los $1.200 por litro, expone la cruda realidad de una crisis económica. Nutricionistas exploran opciones ante la difícil tarea de acceder a una alimentación saludable, resaltando la vital importancia de la leche en la nutrición infantil.
En medio de la aguda crisis económica, un elemento básico del hogar argentino enfrenta una escalada descomunal de precios: la leche. Desde el comienzo de 2024, este producto esencial ha registrado un impactante aumento del 70%, alcanzando precios estratosféricos que desafían la capacidad adquisitiva de las familias. Este preocupante escenario plantea una pregunta crucial: ¿existen alternativas viables para la alimentación de los más pequeños?
El Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA) anunció recientemente que el consumo de leche cayó un 15% en enero de 2024, comparado con el mismo mes del año anterior. Este descenso se vincula con los incrementos de precios hasta diciembre y la disminución del poder adquisitivo de la población.
La situación se torna aún más crítica al conocerse que el precio de la leche ha experimentado incrementos sucesivos desde principios de año, según reveló Fernando Savore, vicepresidente de la Federación de Almaceneros de la provincia de Buenos Aires (FABA). Savore manifesto que el litro de leche se vende actualmente entre $800 y $1.200. Este aumento del 70% en lo que va del año golpea directamente el bolsillo de las familias argentinas.
Ante este escenario, surge la pregunta inevitable: ¿existen alternativas accesibles para la alimentación infantil? Savore propone sustituir la leche con yogur o queso. Sin embargo, resalta que estos productos también han experimentado aumentos significativos. Un yogur de litro de primera marca se encuentra en $2.000, mientras que uno de empresa pyme alcanza los $990. Similarmente, un queso crema de 400 gramos tiene un costo de $2.000.
La dificultad de encontrar opciones económicas se manifiesta en la perspectiva de un experto en nutrición. Este profesional subraya que las Guías Alimentarias para la Población Argentina sugieren dos a tres porciones diarias de lácteos, destacando la importancia de estos productos en la dieta. En el contexto de dietas veganas, que excluyen alimentos de origen animal, se propone una bebida de soja sin azúcar agregada, acompañada de legumbres, semillas, tofu, hojas verdes, brócoli y almendras para cubrir las necesidades de proteínas y calcio en los niños. No obstante, se señala que la biodisponibilidad del calcio en estos alimentos es menor, lo que presenta un desafío para satisfacer completamente los requerimientos nutricionales de los más pequeños.
La escalada desmesurada de precios en la leche plantea un desafío crítico para las familias argentinas, especialmente en la alimentación de los más pequeños. El aumento del 70% en lo que va del año refleja una realidad preocupante que compromete la capacidad de acceso a alimentos esenciales. Mientras se buscan alternativas, la pregunta persiste: ¿cómo garantizar una alimentación saludable y asequible en medio de esta crisis económica que impacta directamente en la mesa de todos los argentinos? La búsqueda de respuestas continúa, pero la urgencia de medidas que aborden esta problemática es innegable. La leche, símbolo de la canasta básica y esencial en la nutrición infantil, se convierte en un indicador doloroso de las dificultades que enfrenta la sociedad argentina en su lucha diaria por acceder a una alimentación digna.