La clase media se encuentra en el epicentro de los estragos provocados por el ajuste económico, experimentando una disminución significativa en su capacidad de consumo. Un estudio realizado por Moguier Consultora de Estrategia, con más de 30 años de experiencia en este tipo de análisis, revela cómo la combinación de la caída de los ingresos y el aumento de los precios ha llevado a cambios notables en los patrones de gasto durante los últimos cinco meses.
La caída del 10% en los salarios formales reales para diciembre, según la mayoría de las consultoras privadas, ha tenido un impacto directo en la clase media, generando una restricción en sus hábitos de consumo y alimentando un círculo recesivo.
Fernando Moiguer, CEO de Moguier Consultora de Estrategia, destacó que después de un año como el 2023, donde a pesar de las restricciones de ingresos la gente sentía la necesidad de gastar rápidamente, ahora se percibe un cambio fenomenal en menos de 60 días. El fuerte aumento de la inflación ha generado la sensación de que el dinero no alcanzará para llegar a fin de mes, llevando a la clase media a adoptar medidas de austeridad.
Los seis rubros que reflejan de manera más evidente la caída en el consumo de la clase media son:
- Marcas Blancas: Casi el 70% de los hogares prefieren estas etiquetas, que funcionan como segundas marcas de las grandes superficies de ventas.
- Carnes: El 50% de los hogares reduce sus compras, afectando incluso las tradicionales reuniones de «asado de los domingos».
- Salidas a Comer: Para el 30% de los hogares de clase media, las salidas a restaurantes se han vuelto prohibitivas.
- Streaming: La disminución en la suscripción a plataformas para ver series y películas afecta al 35% de los hogares.
- Menos Auto o Moto: El 35% de los hogares ha optado por aumentar el uso del transporte público debido al incremento de los combustibles.
- Salida a Tomar un Café: Un tercio de la clase media ha recortado esta actividad como parte de las medidas de ahorro.
El ajuste económico ha generado un cambio drástico en los hábitos de consumo de la clase media, planteando desafíos significativos y evidenciando la necesidad de buscar soluciones que alivien la presión sobre esta parte vital de la sociedad.